Farit miró a Luna sin disimulo. Ella bajó la mirada avergonzada, tratando de que él no se diera cuenta de su nerviosismo el cual trataba de ocultar, pero estaba saliendo a flote. Pero fue demasiado tarde, la duda volvió a surgir en el interior de Farit.Entonces Luna empezó a preguntarse:«¿Qué pretendía David haciéndose socio de Farit? ¿Por qué me perseguía? ¿Porque estaba ahí en primer lugar?» Cuando ambos hombres se alejaron, Jessy pudo soltar al fin el aire retenido en su garganta. Habían florecido muchas emociones para un solo instante.¡Esto era una verdadera locura! Seguía requiriendo una explicación. Miró a su amiga y le preguntó.—¿Me quieres explicar eso? —La azabache señaló su espalda, siguiendo a los dos hombres que continuaron con su camino.Farit empezó a presentar a David, saludando a los demás socios y empleados de la empresa.—¿Qué está pasando? ¿Qué hace tu exnovio muerto aquí?Luna se preguntó lo mismo peinando su cabello con frustración.También había dejado de f
—No sé qué pretende con esto. Me preocupa que sus intenciones sean dañar a Farit. —Luna dijo preocupada, cavilando la situación. No podía permitirlo si ese era su plan.—Te aconsejo que le menciones a Farit todo lo de David, al menos sabrá a qué se enfrenta. Tener secretos puede empeorar la situación y tu terminarías muy mal ante Farit, Luna. —Jessy le dijo y se encogió de hombros mirándola sugerente.Tampoco le daba buena espina todo esto, y menos que David estuviera como si nada.—Sí, tienes razón. Lo haré. —Luna respondió segura, eso era lo mismo que ella pensaba.—¿Qué haces? No pensarás decirle ahora. —Jessy expresó sorprendida cuando la observó caminar hacia la puerta de la cocina.Luna la miró pensativa, eso era exactamente lo que iba a hacer, ¿Estaba mal?—Es la fiesta de Sol, están todos los empleados, amigos y socios de Farit ¿Qué crees que va a hacer cuando le digas que tu "examante" es en realidad Parisi? —Jessi dijo y alzó una ceja. Luna tenía que admitir que tenía un bu
Pero muy pronto David lo desenmascararía y cuando eso ocurriera esperaría a Luna con los brazos abiertos, y ella iría a él pidiéndole perdón por no haber confiado en su palabra desde un principio.Aún con ese pensamiento no pudo contener la cólera, apretando la copa de vino en su mano hasta romperla en mil pedazos.Todos los presentes se sorprendieron, incluso Farit y Luna dejaron de besarse al escuchar el ruido del cristal al romperse.—Cada día hacen más frágiles estas cosas. —Parisi exclamó tratando de ocultar lo evidente con una risa fingida.Pero Farit no pensaba lo mismo. Al apretar su propia copa, descubrió que para romperla tenían que poner un poco más de fuerza para hacerlo.Lo que explicaba David estaba siendo imposible de creer y entonces empezó a dudar más de él.Yuri llegó en el momento oportuno para entregarle una servilleta a Parisi y pudiera limpiarse la mano, sin embargo, las heridas se veían un poco profundas. Podría ser que el corte fuera un poco más profundo de lo
Su mirada cambió, había un poco de esperanza en ella y eso le partió el corazón. Luna lo miró seria y atenta a cada una de sus movimientos mientras él se movía sigilosamente hacia su lugar.Quería tocarla, sentirla y abrazarla como no lo había hecho hace mucho, pero Luna se tensó al sentirlo tan cerca.—Tenemos que hablar —musitó aparentando tranquilidad.No quería alterarse ni nada por el estilo, necesitaba tener la cabeza fría y decirle lo que estaba pasando por su mente.Parisi sonrió y asintió, era eso lo que buscaba hacer.Creía que Luna le daría buenas noticias, algún incentivo de que tal vez dejaría a Farit y se iría con él.Estaba seguro de que ella aún lo amaba y que pronto estaría a su lado. Fue por esa razón que decidió seguirla.Minutos antes la observó subir a su habitación, no lo pensó dos veces y fue tras ella aprovechando que Farit estaba bastante ocupado platicando con unas personas.Era la oportunidad que estaba buscando y no la dejaría pasar por nada en el mundo. Se
El sol irradiaba luz fuerte por todas partes, ese día era especialmente esplendoroso. Quería hacer muchas cosas como ir a la playa, nadar o tomar un buen baño de sol. Luna era una chica de 18 años que simplemente quería vivir la vida al máximo.Bajó las escaleras de la casa, a toda prisa. Tomó una manzana del frutero arriba de la mesa y se despidió de su papá de un beso en la mejilla, haciéndolo sonreír por la sorpresa.—¡Ey señorita! —La madre de Luna la llamó al notar que saldría sin pedir permiso. Luna se paró en seco, resopló y puso buena cara antes de dar media vuelta y sonreírle.—Voy a la playa con Paolo y sus amigos —dijo suplicante.—Déjala ir mujer, estamos de vacaciones. —La mujer soltó un mohín, nada contenta.Se suponía que las vacaciones eran para despejarse un poco y alejarse de la gentuza en la ciudad. Vaya sorpresa se encontró cuando se dio cuenta de que en realidad las vacaciones familiares que había dicho su esposo era una convención para los CEO’s importantes de Nue
Los fuertes brazos rodearon su cuerpo con una necesidad palpable, Luna percibió la desesperación al verlo, a él, su único y más grande amor, el hombre de su vida.David le dedicó una sincera, pero ahora triste sonrisa cuadrada, nada lo llenaba más de dicha que ver a su pequeña, aun sabiendo que tal vez ese día sería el último. Camil estaba siendo la culpable de su desdicha, la mujer que le dio la vida se convertiría en su verdugo, la obligaría a casarse con un hombre que no ama para salvar la empresa familiar.En cuanto se enteró de los planes de su madre, Luna corrió a los brazos de David esperando que él pudiera consolarla. Que le dijera que todo iba a estar bien porque ella no quería casarse con un desconocido.Sus labios se unieron en un fuerte frenesí, añoraba cada día para sentirse casi al final del día. En ese pequeño cuarto de 4 paredes, aquel que era el único testigo de su amor. Ambos cuerpos temblaron por la necesidad de sentirse mucho más.David descendió al cuello lechoso d
Tenía la esperanza de que Luna llegaría amarlo, con dedicación y amor lo conseguiría, así que aceptó el trato de nuevo. La rubia abrazó a su padre fuertemente, y este le respondió con el corazón en la mano, no quería que su única hija se sacrificara, pero que más podía hacer si todo estaba perdido.Tres meses atrás.Farit estaba vestido de negro junto a su hermana. El abogado de la familia estaba dando a conocer las cláusulas del testamento de su padre después de que este falleciera. Había dejado la reunión de los CEOs atrás. Ahora lo más importante era saber que pasaría con ellos, ya que su mamá había muerto hace algunos años y ahora su papá. Se habían quedado prácticamente solos.—Como primer punto, para mis hijos Farit y Sol, ellos serán mis herederos universales. —Citó el abogado—. Tanto mis propiedades como mi cuantiosa suma en los bancos serán repartidos por partes iguales entre ambos. —Era de esperarse, eran su única familia—. La empresa Montalvo será manejada por Farit, quien a
Caminó por el centro comercial, al menos se distraería viendo las tiendas. La verdad no le apetecía comprar nada, solo le gustaba observar. Estuvo a punto de entrar a una tienda cuando su celular empezó a sonar. Un número desconocido se veía en la pantalla, aun así contestó. Podía ser algo importante.—¿Luna? —La voz profunda de David sonó del otro lado del parlante provocando que detuviera sus pies al igual que su corazón. Por la sorpresa, una enorme sonrisa apareció en su rostro y su corazón comenzó a latir de manera más acelerada.—David, mi amor —susurró y escuchó un suspiró al otro lado de la línea. No podía creer que él estuviera llamándole.—Pensé que cambiarías tu número de celular. —El chico estaba con un nudo en la garganta después de enterarse de todo. Quería ir por ella, estuviera donde estuviera y rescatarla de las garras de aquel idiota.—David... —Quería decirle tantas cosas. Pero no podía, se sentía sucia, avergonzada por no luchar por su amor.—Pequeña, te ves hermosa