35

—¿Cómo estás?

—La verdad, extrañándote, nadie puede derrotarme jugando a las carreras.

—Pero bueno, ya estoy de regreso.

—Tu tono de voz se siente, no sé más. ¿Alegre? Parece que las cosas te están yendo bien.

—No sé si alegre, pero sí me siento mejor que otros días. Bueno, vamos por esa partida, vamos tres a dos y tal vez podamos ver lo que el viento se llevó, la puedo exhibir si conversamos en una reunión virtual, tranquila, sin vernos las caras.

—Así es mejor.

—No sé si andas suspirando por tu dichoso y supuesto novio o el señor N, te oí conversando con él, mujer, andabas maldiciendo al mando del videojuego.

—No digas eso, bueno, si es que con el señor A, hasta me olvido que soy una señorita bien portada que ni siquiera eructa.

—No me cuentes esas cosas, mujer, un poquito de amor por mis dulces oídos, por favor, no sé cómo puedes hablar con un extraño de esa manera.

—No es un extraño, es el señor A.

—Ni que fuera un personaje de comic, pero bueno, entonces si tus suspiros no eran
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App