- Felicidades, sabía que ibas a ganar – dijo Helen, mientras curaba las heridas de Ashley. Eran pocas, pero nada grave.
- Fue una gran oponente, aunque yo haya salido herida - Ashley sonrió y mordió sus labios al sentir a Helen masajear su cuerpo, sentía algo de dolor por los golpes recibidos.- Mañana te haré el depósito, es una gran suma. Muchos apostaron a tú favor cuando se enteraron de tu retiro – dijo Camilo sentado aun lado de ella, observándola.- Gracias, Camilo - Ashley empezó a recoger sus cosas, lista para marcharse.- Ve con cuidado, quieres – volvió a decir Helen – tienes algunos moretones y tienes que hacerte atender en el hospital.- Mañana iré al médico, no te preocupes.Ashley se despidió de sus amigos y fue al estacionamiento, antes de ponerse el casco, unas luces de coche la alumbraron por la parte de atrás.- Sube al carro, Ashley.Ashley reconoció esa voz tan gruesa que firme. De inmedia