capitulo 22
ALAI

Desperté con un fuerte dolor de cabeza. Estaba muy fría y pálida, pero decidí levantarme para ir a trabajar. Sé que en la oficina hay mucho trabajo y no me puedo dar el lujo de faltar. Entro al baño, me ducho y decido colocarme unos pantalones con una blusa y tacones.

Cuando bajo, veo a Máximo desayunando.

- Hola, Máx. - Le doy un beso, pero al separarme veo su cara de confusión.

- ¿Para dónde vas?

- Al trabajo, ya no soporto estar encerrada. Quiero ir a trabajar. - Veo cómo lo piensa hasta que al final asiente.

- Está bien, a ti no te puedo negar nada. - Le sonrío y me siento a desayunar con él.

Cuando llegamos a la oficina, entramos cogidos de la mano y siento cómo todos nos miran.

- Máx, todos nos miran. - Le digo en un susurro.

- ¿Y? Mejor que la gente sepa que eres mi novia - Yo ruedo los ojos.

Entramos a su despacho y nos ponemos a trabajar. Al parecer, sí había mucho trabajo. A la hora del almuerzo, me reúno con Tam en la cafetería.

- ¡Tam! ¡Tiempo sin verte! - La abrazo co
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