[AZUL]
Santiago me envuelve en un abrazo que me transmite protección, pero que al mismo tiempo me hace temblar de pies a cabeza. Está vez sus labios no me han provocado miedo; sino que, por el contrario, me han hecho sentir lo mismo que sentía junto a Fernando. Sé que Victoria me dijo que no debía pensar en que olvidaría a Fernando si sentía lo mismo con Santiago, pero mi mente me juega en contra. Siento los dedos de Santiago quitando las lagrimas de mis mejillas y es un acto que realmente me toma por sorpresa. Me siento un poco mejor en el banco donde nos encontramos y lo observo. Él no me dice absolutamente nada, solo me lanza una media sonrisa.
—Perdóname— Le digo avergonzada.
— ¿Por qué debería perdonarte? — Me pregunta en lo que yo siento casi como un susurro.
— Por ponerme de esta forma. Seguramente debes estar creyendo que so