Punto de vista de Lucas
—¿Qué? —Josi se volvió hacia mí, la incredulidad evidente en sus ojos. Mientras que Carla no parecía tan impactada como su hija.
—¿Estás seguro?
—Sí, no olvidaría el rostro que atormentó mis años de adolescencia, el rostro que masacró a una manada entera. —dije con rabia a través de una mandíbula tensa mientras estudiaba la fotografía de nuevo, un largo suspiro escapándose de mí. Sí, no había duda en mi mente.
—No, eso no puede ser... ¿verdad, mamá? —Josi se inclinó hacia mí, sus ojos escaneando la fotografía cuidadosamente.
—Enrique, debes estar equivocado. —continuó, como si yo pudiera equivocarme en algo así.
—Créeme, Pelirroja, desearía estar equivocado.
—¿Estaba solo? ¿Lo hizo solo? —presionó Carla, una tristeza marcada dentro de sus ojos.
Ella no lo defendía, ni siquiera consideraba que yo pudiera estar equivocado.
Que había cometido un error. No, ella sabía de lo que era capaz.
—Yo... —Cerré los ojos, remontándome al recuerdo que había estado intentando o