Connor Wellington es el Rey de los Lobos , Acabando su transformación y su coronación regresa a la Ciudad para buscar a su Mate y para visitar a su mejor amiga, encontrándose con una gran sorpresa tendrá que secuestrar a su humana favorita. Kiara Jonhs es una muchacha que de no ser por el apoyo y la compañía de su mejor amigo no hubiera sobrevivido a la soledad que había dejado su madre al marcharse con con el hermano de su difunto padre, se aferró a sus brazos y a su compañía, sin saber que en el fondo el estaba destinado a ser su compañero por toda la eternidad.
Leer másNarra Connor.
- Señor Wellington , acabamos de llegar a Italia - Me informó el jefe de seguridad , sonreí y observé la hora en mi móvil.
- Entonces creó que aún podríamos ir a visitar a Kiara - El frunció su ceño levemente.
- ¿Se trata de su Luna, Señor? - Cuestionó.
- Aún no se si es mi mate, Ya que la última vez que la vi aún no obtenía mi transformación, pero no creó que ella sea mi Luna, Aún que si lo fuera me haría sentir extraño - El asintió y tomó asiento, pronto aterrizamos en Italia y subí a el auto que me esperaba.
- ¿A el hotel? - Cuestionó el chófer.
- No, vamos a el segundo edificio de la Segunda avenida - El hombre asintió y pronto llegamos a el edificio de mi pequeña, baje y caminé hasta la entrada.
-Señor Wellington - Saludo con una sonrisa el portero.
- Hola Tomás - Le salude - ¿Kiara llegó? - el asintió.
- ¿Le informó que va a subir? - Negué.
- Es una sorpresa - El asintió, me dirijo a el ascensor y al llegar a él quinto piso camino hasta a el apartamento número 51, al llegar tocó el timbre.
Ese olor - Gruñe mi lobo al sentir un delicioso olor a Frutas y a Vainilla.
- ¿Quién toca a esta h.. - Las palabras de Kiara se atascan al verme y una sonrisa comienza a extenderse en sus labios - Connor - Yo aún estaba paralizado, el olor que ella desprendía no tenía igual, ella era mi Luna.
- Kiara - por fin pude pronunciar su nombre, ella sin esperar nada se abalanzó a mis brazos, su olor inundó mis fosas nasales, envuelvo mis brazos en ella y aspire su esencia cerrando mis ojos.
- No me avisaste que volvías, te extrañé - Murmuró sin apartarse de mi.
No volverás a extrañarnos mi Luna - Mi lobo estaba más que feliz por haberla encontrado.
- También te extrañé Kiara - La separé de mi un poco y tomando su rostro entr mis manos bese su mejilla.
- Ven - Sonríe tomando mi mano y llevándome dentro de su casa - ¿Tienes hambre? - Cuestionó, una sonrisa se expandió en mis labios.
- Cuando tu cocinas cualquier persona tiene Hambre - Ella se sonrojó levemente, si existía alguien de alma pura y a la misma vez fuerte era Kiara.
- Entonces siéntate - Me señaló y comenzó a moverse por su cocina.
Será una buena Reina - Suspiro enamorado Alex, mi lobo.
Luego de cenar con Kiara la observé por un momento, era una de las mujeres más bellas que podría llegar a conocer, no entendía como aún seguía sin tener novio.
- Necesito conversar de algo contigo Kiara - Tome sus manos entre las mías, eran suaves y extremadamente pequeñas - ¿Recuerdas cuando te conté que me iba por que tenía mi transformación y la coronación? - Sí, Kiara sabía mi secreto, desde que la había conocido me había transmitido seguridad, Confianza y un Amor inexplicable hasta ahora.
- Sí lo recuerdo, ¿Que tal salió todo? - Suspiré y sonreí sutilmente.
- Encontré a mi Mate - La sonrisa de ella se borró, dando paso a una expresión de tristeza.
- Que bien - Murmuró apartando la mirada.
Cree que es otra - Exclamó mi lobo.
- Espero que sea una buena chica - Sonríe.
Narra Kiara.
Escuchar esas palabras fue como si me hubieran lanzado un balde de agua fría.
- Es la mejor chica que existe - Aseguró, un nudo comenzó a formarse en mi garganta.
- Me alegro - No era capaz de decir nada más - ¿Como se llama? - El sonríe, a la misma vez que bebo de mi agua.
-Kiara - Me atraganto con el agua sintiendo mi rostro volverse rojo.
- ¿Q-que? - Tartamudeo nerviosa.
- Se llama Kiara, Es de cabello largo castaño claro, tiene unos ojos que son casi mieles y vive en Italia - Me describe, con una sonrisa en sus facciones.
- ¿No es una broma? - La expresión de el cambia a una sería.
- ¿Crees que jugaría con algo así? - Su voz ahora era ronca - Eres mí Luna Kiara - Murmuró serio.
- Esto es... no se que decir, es muy... Raro - El asintió.
- Créeme que estoy igual que tú, pero me encanta la idea de que seas mía - Sonríe de medio lado.
- Pero soy... Soy... Humana - Le recuerdo.
- Lo sé, y no me importa - Se levantó y caminó hasta la ventana, la noche había caído y la luz de la Luna alumbraba Italia - Nunca pensé merecer a una mujer tan pura como tú - Se volteo y sonríe - Además si tu quieres podrías dejar de ser humana - mis ojos se abren completamente.
- Mucha información por hoy - Una risa de nervios salió de mis labios, me levante y al estar por tomar los platos sucios sentí una respiración en mi cuello y mi piel se eriza.
- Nunca pensé que fueras tú Kiara - Sentí sus dos manos en mi cintura y un beso en mi cuello me arrancó un suspiro, con delicadeza me hizo voltear a verlo y apartó un mechón de mi cabello - No bajes la mirada mi pequeña - Murmuró tomando mi mentón y así haciendo que mis ojos se crucen con los suyos - No se me había venido a la cabeza que tú fueras mi Luna - Sonríe - Pero... Ahora que lo pienso... Mi padre siempre dijo que mi Mate causaría siempre que mi vida alegría en los momentos de tristeza, tú lo has hecho siempre - Acarició su nariz en mi mejilla con los ojos cerrados - Aún recuerdo cuando volví de La Manada luego de la muerte de Mamá - Susurro, yo sabía que ese era el peor recuerdo que tenía de su vida - Llegué de mal humor, en el instituto nadie se me acercó, ni siquiera las supuestas chicas que me amaban, pero tú... Tú sí estuviste, recuerdo que ni siquiera quería comer, pero tu me trajiste aquí y me preparaste toda una mesa con la comida que me gustaba y lo hice... Comí, me consolaste, lloré sin vergüenza a tu lado y supiste soportarme - Murmuró abriendo los ojos - Tú eres mí Luna, solo Mía - La posesión en su voz me hizo tiritar.
- Entonces, ¿Si me extrañaste? - El me observó por unos segundos y luego su risa inundó mis tímpanos.
- Sí, sí te extrañé - Sonríe momentos después - ¿Puedo quedarme hoy? - Cuestionó, Sonreí y asentí.
- Pero sabes que tengo solo una habitación y una cama, deberás ocupar el Sofá - El frunció su ceño levemente molesto.
- ¿Es broma? ¿Verdad? Kiara - Cuestionó serío.
- Claro que sí, sabes que nunca he tenido problemas de dormir contigo, solo espero que ahora que tuviste tú transformación no te vuelvas un pervertido - El sonríe pícaro y se acerca a mi, quedando a Escasos centímetros de mis labios.
-La transformación no me ha vuelto Pervertido, encontrar a mi Luna, Sí - Y sin decir nada me robo un beso.
- ¡Connor! - Exclamó sonrojada.
- Sí nena, Soy Connor, Tú alma gemela y tú Alpha - Gruñe y me coge con fuerza de la cintura, para seguido de eso reclamar de forma feroz mis labios, un pequeño jadeo de mi parte se ahoga en el beso - Mi Luna - Susurro poniéndome sobre la mesa, mis labios se mueven a el compás de los suyos, pero mis sentidos se alarman cuando siento sus manos acariciar mis piernas Desnuda desde la rodilla hasta a los muslos.
- No - Negué apartandolo de mi, mi respiración estaba agitada y mis mejillas ardían bajo sus penetrantes ojos Grises.
- Perdoname Kiara - Murmuró apenado y sonriendo acarició mi mejilla - Jamás voy a faltarte el respeto, a ti no, eres y serás lo más importante que me pudo haber regalado la Diosa, eres mi complemento, Mi pequeña Luna - Me abrazó a su cuerpo, de mis labios salió un suspiró y le correspondo cerrando los ojos, su regreso me había traído sorpresa y alegría, luego me Confesó que yo era su mate y ahora me había besado. Eran muchos sucesos en una noche.
Narra Alessandro.- Estarás bien pequeño, ya verás que así será - le sonreí a Christian.- ¿Por qué mamá no ha venido a despedirme? - cuestiona el pequeño con tristeza.- Es que mamá está preocupada buscando a tú hermano - suspiro - pero ella te ama y yo también - sonrió.- No eres mi padre - niega el - Pero eres bueno y se que nos quieres y que nadie amará a mi mami del modo en que tú lo haces - menciona, sonreí dándole un abrazo.- Gracias pequeño, no sabes lo contento que me pone oír eso, eres un gran niño, digno hijo de tú padre - pellizco su mejilla con suavidad.- Es hora de que nos vayamos - menciona Samuel apareciendo.- Los iré a dejar, es mejor prevenir - respondo tomando la mano y las cosas del hijo de mi amada, luego iría por ella, estaba consci
Narra Kiara.- ¿Dónde está? Necesito a mi hijo - exclame entre lágrimas de rabia, tristeza y frustración al no tener a uno de mis pequeños conmigo.- Estamos haciendo lo posible por recuperar a Javier, de verdad pero esto no ha sido fácil, hermosa - niega Alessandro suspirando y pasándose las manos por el cabello.- ¿Y si esta herido? ¿Y si tiene frío? - cuestione mirándolo.- Kiara - tomó mi rostro entre sus manos para hacerme verlo a los ojos - te juro que daré todo, incluso lo que no tengo para recuperarlo - menciona el con los ojos cristalinos.- Lo sé, confío en ti, de verdad Alessandro, pero...ellos son tan despiadados, tan crueles, quizá lo están tratando mal - suspire con un nudo en la garganta.El sin saber que decirme, me abrazo con lentitud besando mi frente.Narra Ale
Narra Kiara.- ¿Dónde está? Necesito a mi hijo - exclame entre lágrimas de rabia, tristeza y frustración al no tener a uno de mis pequeños conmigo.- Estamos haciendo lo posible por recuperar a Javier, de verdad pero esto no ha sido fácil, hermosa - niega Alessandro suspirando y pasándose las manos por el cabello.- ¿Y si esta herido? ¿Y si tiene frío? - cuestione mirándolo.- Kiara - tomó mi rostro entre sus manos para hacerme verlo a los ojos - te juro que daré todo, incluso lo que no tengo para recuperarlo - menciona el con los ojos cristalinos.- Lo sé, confío en ti, de verdad Alessandro, pero...ellos son tan despiadados, tan crueles, quizá lo están tratando mal - suspire con un nudo en la garganta.El sin saber que decirme, me abrazo con lentitud besando mi frente.Narra Ale
Narra Kiara.Despues de un rato, Alessandro regreso junto a los guardias, mis ojos se pusieron cristalinos al ver que con el habian vuelto mi cuñado y mi suegro, sin embargo, mi niño, mi pequeño y dulce Javier, no estaba con ellos.- ¿Donde esta Javier? - cuestione mirandolo a Ismael y Samuel, los dos mantenian la cabeza agachada.- Lo...lamento Kiara....yo....nosotros tratamos de cuidarlo pero cuando aparecieron los hombres del hijo de puta de Paolo tuvimos que enfrentarlos, cuando pudimos lo buscamos pero...no lo pudimos encontrar - Respondio Ismael con la voz ligeramente quebrada.- Maldito Paolo, quedense con Christian - No era una peticion, era una orden clara, camine hasta los calabozos sintiendo los pasos de Alessandro a mis espaldas.- Kiara por favor espera - Pidio tomando mi brazo con firmeza pero sin lastimarme en absoluto.- Dejame Alessandro, esa mujer debe decirme donde se esco
Narra Kiara.Me encontraba concentrada revisando papeles cuando un ruido ensordecedor sonó en la parte de abajo del castillo, salí con rapidez y al llegar abajo me encontré a los guardias peleando con varios híbridos, me uní a ellos pues el plan era que si algo sucedía, mi suegro y Ismael se harían cargo de los niños, yo servía más luchando, sentí la fuerte presencia de Paolo atrás mío.- ¿De verdad creíste que no me enteraría en ningún momento de que raptaste a mi informante y de la muerte de Ian? - Cuestionó en un murmullo y mirándome fijamente.- Te tardaste, Paolo - le sonreí con burla antes de golpearlo a puño cerrado, iniciando una pelea que tal parecía no tendría fin, Paolo era un vampiro veterano y con mucha práctica en el campo de batalla, además, tal parecía el simplemente quería hacerme heridas que me dañaran pero que pudieran sanarse.- Eres toda u
Narra Ismael.Observé a Kiara salir de la habitación de los niños y me acerqué preocupado al verla con los ojos cristalinos.- Kiara - la llamé caminando a donde estaba - ¿Que ocurre? ¿Estas bien? ¿Les sucedió algo? - pregunte seguido.- Solo...parece que estoy haciendo las cosas muy rápido - Susurró secándose las lágrimas.- ¿A qué te refieres? - Pregunte confuso por aquello, Kiara era una persona muy íntegra.- Yo...Christian y Javier, ellos no están de acuerdo con que...haga una vida con Alessandro - Contesta bajando la mirada - Usted...¿Cree que...quizá me estoy apresurando? Quizá.. soy demasiado egoísta - Sollozo, hice una mueca y me acerqué a ella para brindarle un abrazo.- No, no, ellos necesitan tiempo, son niños - la tranquilizó acariciando con cariño su espalda - No eres egoísta ni mucho menos por querer tener un hombre bueno y que te quiera - le sonrió.
Más Capítulos
Último capítulo