Entré rápidamente en casa, encontrando de primeras a mi hermano con un sándwich en las manos, lo tomé dándole un mordisco lo bastante grande que hizo que alguien gruñera en desaprobación. Me giré a ver en dirección del sonido encontrando a mi madre, rodé los ojos y Aarón tomó el sándwich acercándose a mi oreja.
- No pelees con ella, tendrá consecuencias – rápidamente se alejó subiendo las escaleras y caminé en dirección a donde mi madre se encontraba.
- Hola, madre – afirmé cuando se hizo a un lado para que pasara a su despacho.
Entré y me senté en el sofá de cuero – Isabella, ¿Dónde estuviste anoche? – preguntó rápidamente sentándose frente a su escritorio.
- Aquí
- No me mient