Capítulo 59 - Recordar y Perdonar

No podía creer lo que me había pasado, ¿Se me apareció un ángel? Era un puto demonio, ¿cómo se me aparece un ángel?

—¡Si Simón!, pero solo lo veía yo.

Lo último lo susurré, miré al altar, se sentía una paz en ese lugar, una paz… desde niño no la sentía, volví a experimentarla al lado de Verónica. ¿Qué ocurría?

» ¿Ya se fue don Fausto?

—Sí. —Su mirada era desconcertante.

—No te preocupes Rata, estaré bien, hace años no entraba a una iglesia.

—Jamás lo he visto ingresar a una.

—Cuando tenía seis años, recuerdo que mi… iba cada ocho días, al abandonarme jamás volví. —Le di una palmada en la espalda—. ¡Se me apareció un ángel Rata!, toda la semana he hablado con mi ángel de la guarda. —sonreí con nervios—. ¿Crees que estoy loco?

—La verdad es que sí, tal vez esquizofrénico, no comes bien, a duras penas has dormido y no te has arreglado.

—Necesito ver a Verónica, si mañana muere…

Se vino una ola de sentimiento y exploté en ese instante, Rata me abrazó. Era la primera vez que me veía llorar
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App