Capitulo 688
Poco después, llegaron al borde de un abismo profundo.

—¡Muchacho, salta! —le insistió Elías, con tono firme.

Juan observó el abismo que se extendía ante él, sin un fondo visible. Extendió su percepción hacia el vacío, y enseguida se dio cuenta de que el aire estaba lleno por completo de restricciones: algunas prohibían volar, otras impedían el uso de energía vital, y algunas más bloqueaban cualquier tipo de percepción. Había de todo.

Con una expresión algo preocupada, Juan dijo:

—Anciano, soy solo un discípulo del nivel del Poderoso Marqués Guerrero, si salto directamente, temo que no muera de milagro, pero sí perdería media vida, ¿no es así?

—¿Tienes miedo? ¡Este tipo de restricciones las puse yo mismo en su tiempo, con la única intención simplemente de asustarte a ti y a otros como tú! En realidad, si te atreves a saltar, no pasará nada. ¡Puedes confiar en mí, no te haré daño! —Elías le respondió en su mente de forma despectiva, con evidente molestia.

—Anciano, ¿no estarás tratando
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App