Hola! Gracias por acompañarme! ¿Sol lo tiene que perdonar? ¿Tiene que creer en él? Veremos que sucede, pronto vamos a saber que decidió, más allá de que el viaje esté programado. Les dejo algunas recomendaciones. Flor naranja- Doctor Gonzalo Daver- Quiero una secretaria fea- Morir de amor- Secrtaria ¿Te quieres acostar conmigo?
La mirada de Morena decía que no estaba para nada de acuerdo, en cuanto estemos solas, le voy a confesar que esa misma madrugada, iba a partir.-Tengo que estar presente sí o sí, porque es una semana muy importante, ya sabés, el ojo del amo alimenta el ganado, creo que así es el dicho.-Lo entiendo, pero estos documentos…-Me quiero quedar tranquila por si surgen imprevistos.Me pareció justa mi respuesta, no estoy segura de que me haya creído.Solamente espero que no salga corriendo para contarle a Ema.- ¿A qué hora te vas?Rogué para no delatarme, porque Ema haría algo para impedir mi viaje.-Por la noche.Traté de demostrar firmeza y no titubear.-Que tengas buen viaje y espero verte pronto, a la vuelta.-Gracias.Finalmente nos despedimos.- ¿Mañana? Sol, no creo que…-Tengo que estar en Italia.- ¡Lo sé!Ella piensa que yo no voy a volver.Estaba estacionando en el estacionamiento del colegio dónde asistía mi hijo, tenía que decirle a la directora que Dante se iba a ausentar por
Por Emanuel.No puedo creer mi maldita suerte, siempre me rodeé de mujeres que pretendían cosas inverosímiles.Algunas querían mi amor, otras que les regale un departamento, o que las mantuviera porque sabían que mi nivel económico me permitía hacerlo.Ninguna logró demasiado de mí, porque nunca las deseé más allá de la razón.No me interesaba tener alguna amante fija ni hacerle el novio a alguien.Por otro lado, si bien no me sentía atado, hasta hace poco estaba casado, aunque sólo era un papel y Gloria no se merecía mi respeto.Mucho menos luego del aborto que se practicó, porque lo hizo solamente para mantener ese maldito nivel social que le daba mi fortuna.Dicen por ahí que yo me merecía tener esa mujer, tal vez fue mi karma, lástima que todo eso recayó en Bruno.Me pude acercar a mi hijo y eso me hacía muy feliz, sólo me faltaba convencer a su madre de que ellos son lo más importante de mi vida.Había logrado desayunar con Sol, hasta que ella fue al baño, en cuanto se alejó, una
Por Ema¡Maldita sea!Ni siquiera había almorzado, solamente tenía en mi estómago varios cafés, esos que tomé cuando estaba declarando.Apurando el paso subí a mi camioneta y tirándosela encima a varios autos para poder pasar, llegué relativamente a tiempo, claro que la sesión ya se había atrasado una hora.Mi cabeza estallaba, mi amigo había almorzado con Sol.No podía pensar con claridad.El psicólogo me esperó porque algo le comenté a Cris y él habló con el terapeuta.Más allá de eso y de que trabajase en la clínica de mi amigo, a nosotros nos iba a atender en su consultorio particular y a cobrar cada segundo de retraso, eso no era problema para mí.Por supuesto que en la clínica de mi amigo no iba a pagar un peso, pero le estaría sacando recursos para otros pacientes que quizás no podrían pagar un arancel particular.Esa empatía la aprendí de mi madre, porque ella siempre pensaba en los demás.- ¡Llegaste!Me reclamó Gloria.¡Eso es inadmisible!- ¡Papá, te extraño!No entiendo por
Por EmaMi mente no comprendía las palabras de mi amigo.Sol no se pudo ir sin despedirse, ella no pudo hacer esa jugada, no se pudo alejar de golpe de mi vida.Aunque había dicho que el viaje era por negocios, tuve miedo de que ya no quiera volver nunca más.Se me partía la cabeza, verdaderamente me estaba estallando.Se movió hasta el piso.- ¿Cuándo?- ¡Hoy! ¡Ahora!-Voy a buscarla al aeropuerto.Dije agarrando las llaves de mi camioneta, pero sentí que se me nublaba la vista y que el maldito suelo se seguía moviendo.- ¡Maldita sea, se mueve el piso!Le digo a Cristian.- ¿Estás borracho?- ¡No! No tomé una gota.Era verdad, el whisky que me había servido, estaba intacto y en la cena tomé gaseosa, era raro, pero como sentía que me faltaba energía y a la vez tenía mucha ansiedad, no quise abusar con el alcohol.-Voy a buscarla.Repetí, pensando en decirle a uno de los guardaespaldas que suelen seguirme en otro auto, que me llevara.-El vuelo salía a las 10.- ¿Qué? ¿Estás seguro? ¿
Por EmaComencé a sentir mucho cansancio.Me habían aplicado dos inyecciones, ni sabía para qué eran.-Voy a avisar a mis padres en dónde estoy.- ¿Qué saben sobre Ema?Escucho como si sus voces fueran muy lejanas.-Que es el padre de Dante, y conocen desde siempre a su familia.Estaba haciendo un esfuerzo para escuchar lo que hablaban, quería saber algún secreto, algo que me diera la pauta de que es lo que sucede para que Sol huya de mí, tal vez no me hago cargo de mis errores.Mis ojos se cerraron, los párpados me pesaban y estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para mantenerme despierto.¿Qué mierda me dieron?Morena habló con su madre, no dijo nada nuevo, pero yo estaba dejando de entender sus palabras.-Cada hora hay que revisarlo.Escuché a mi amigo cuando su novia dejó de hablar por teléfono.Abrí los ojos.Me di cuenta de que Cristian me estaba sacudiendo.-Despertate, señor todopoderoso.Mi amigo no pierde su buen humor y siempre habla con ironía.Por un momento pensé que ha
Cristian estaba preocupado por mi salud, nunca me había visto colapsar, y él sabía que aparentemente, yo era un hombre que vivía la noche y que a pesar de tener “familia” era un tipo que no sabía en donde estaba parado en la vida y que lo que dije con respecto de Sol, era una verdad absoluta.Me debo haber puesto pálido, porque mi amigo se acercó y comenzó a revisarme los signos vitales y toda la rutina que desde anoche está haciendo.-Morena, no sé qué te hizo cambiar de opinión, pero dejá de comprometer la salud de Ema.Fue firme en sus palabras.-Me equivoqué al creer en vos y defenderte.Me dijo. A Cristian no le contestó y salió de la habitación sin contestarle.-Perdón, hermano, discutiste con tu novia por mi culpa.-No te preocupes, desde anoche hasta ahora no cambió nada, mejor dicho, ella cambió de opinión y no sé qué pasó, se quiso quedar y me encantó, pero puede ser que dormir mal la haya puesto de mal humor, pero los médicos estamos acostumbrados a pasar muchas horas sin
Por EmanuelLlamé a Sebastián, el día anterior él también quería hablar conmigo y hasta había almorzado con Sol.Eso no lo puedo digerir.Él la encuentra sexi, bella y hasta la hubiera conquistado si mi historia con Sol no fuera tan profunda.Nos encontramos con él para almorzar.Antes de hablar con Morena, quería saber bien que habían hablado ellos el día anterior.Todo se me va de las manos y no me quiero equivocar más.Entré al restaurante dónde muchas veces nos encontramos.Por precaución y a pedido de mi padre, fui con Alex como chofer.- ¿Qué te pasó?Me preguntó Sebastián, cuando me acerqué a la mesa.- ¿Hablaste con Cris?-Sí, me llamó él para preguntarme que hablé ayer con las chicas.-Quiero saber lo mismo.- ¿Qué les pasa?¿Sol se fue y él me pregunta que me pasa?Mi cara era de pocos amigos.Se acercó el camarero para tomar la orden.-No voy a ser tu niñero, Cris me dijo que no podés comer casi nada.Comprendí que me tenía que cuidar, porque mi viaje a Italia, si bien no s
Por EmanuelMorena me mira y sin contestarme, niega con la cabeza.-Me di cuenta de que Sol tiene razón, que ustedes son mujeriegos empedernidos y que pretenden manejarnos de cualquier manera, aunque lo que tienen a mano, son las mentiras.-Estás equivocada, no llegué a buscarla al aeropuerto porque tuve problemas, que ya sabés cuales son y Bruno se merece estar rodeado de personas que lo quieran.- ¿Y Dante? ¿Qué se merece tu hijo? ¿Se merece que te ocupes de otro niño cuando él también te necesitaba?Mi corazón se estrujó de dolor.Sentí nuevamente una puntada que me estaba incomodando y mi pulso se aceleró.¿Soy una mujercita que no puede aguantarse algunas palabras?Disimulé lo que estaba sintiendo físicamente, ya tendría tiempo para descansar y esa presión en mi pecho, cedería.-No sabía que me necesitaba, ya tenía programada esa entrevista y si se hizo tarde fue por Fernando Vanuchi y vos eso lo sabés, lo que vine a averiguar es que cambió entre anoche y esta mañana, para que ca