Jade y Mara decidieron ignorar a Jason y seguir comiendo. Intentaron mantener la conversación ligera y divertida, pero la presencia de Jason era difícil de ignorar.

"¿Quieres postre?", preguntó Mara, intentando cambiar de tema.

"Sí, por favor", respondió Jade, sonriendo.

Mara pidió un tiramisú y Jade un gelato de limón. Mientras esperaban el postre, Jason se levantó de la barra y se dirigió hacia la salida.

"Creo que se fue", susurró Mara.

"Mejor", dijo Jade, suspirando.

Pero justo cuando pensaban que habían escapado de la tensión, Jason se detuvo en su mesa.

"Jade, necesito hablar contigo", dijo, su voz baja y urgente.

Jade se sintió incómoda.

"¿Qué pasa?", preguntó, intentando mantener la calma.

"No aquí", dijo Jason. "Fuera."

Jade se volvió hacia Mara, buscando apoyo.

"Mara, ¿qué hago?", preguntó, nerviosa.

Mara miró a Jason con desconfianza.

"No tienes que hablar con él si no quieres", dijo Mara.

Jason frunció el ceño.

"Por favor, Jade, es importante", insistió.

Mara se puso de p