Capítulo 17. La marca del sol.
Dalila.
Después del desayuno los chicos me acompañaron a la casa de la manada para recoger a Anita. No estaba preocupada con volverme a encontrar con Jacob, para mí ese idiota estaba muerto.
Mi madre, el cielo bendiga su corazón, ya había comprado una jaula, aserrín y los trastes para su comida y agua.
- Cachorra, ¿Que sucede? Tienes los ojos rojos y estoy segura de que no es por resaca. - Dijo mi madre viéndome con preocupación.
- Es el polvo de Cheetos, señora S. Puede ser que nos hayamos quedado dormidos dentro de una piscina llena de comida. - Dijo Carl pasando su brazo musculoso por mis hombros.
Mi madre se río y negó con la cabeza divertida.
- ¿Qué planes tienen para hoy, chicos? - Preguntó mi madre.
- Hoy pasaremos la mañana en la biblioteca y luego tenemos que ir a la oficina. Ya sabe, estudiar para ser miembros del consejo y todo eso. - Dijo Clara encogiéndose de hombros.
Ahora que ya estaba más tranquila pude notar que Clara estaba un poco apagada.
*Recuérdame que le pregun