Esta noche, por ahora dejemos a Clara en paz.
En el futuro, buscará una buena oportunidad para pisotear la dignidad de Clara, y que ningún hombre se atreva a aceptarla.
En el salón de baile, la música resonaba melodiosamente.
El perfume de las hermosas flores y las elegantes sombras de las damas deslumbraban, mientras la élite y la alta sociedad se reunían.
Alejandro no se acercó a la gente de la familia Hernández, sino que apareció al mismo tiempo que Rodrigo.
Alejandro en ese momento no tenía acompañante femenina a su lado, y esas mujeres no se atrevieron a codiciarle, ya que todas sabían que ya tenía novia, y no querían buscarse problemas.
¿Quién se atrevería a robarle un hombre a la señorita de la familia Pérez? ¡No se podían comparar!
Sin embargo, las miradas de estas mujeres hacia Rodrigo eran muy diferentes; se podría decir que las dirigían con un deseo extremadamente apasionado y seductor.
La relación entre Rodrigo y Noa solo se hizo pública en el día de las carreras de caballo