Guillermo estaba contento y ahora tenía que pensar cuidadosamente su siguiente movimiento para no descubrirse e igual ayudar a Alina a acabar con ese maldito que los separo.
- ¿Y ella? – le pregunto a uno de los hombres que caminaba a su lado mientras regresaban a la oficina.
- Ella está en la oficina con su guardia acomodando los papeles de la alianza.
- Hehe ok, pide que preparen este almuerzo para todos – mencionó sonriendo de lado y entregándole una nota – aprovechare este valioso momento para retenerla conmigo por este día.
- Entendido jefe, ya le informo de la elección del menú al chef.
- Oye igual dile a William para que veamos lo de la alianza – indicó Guillermo avanzando hasta su oficina donde vio a Alina acomodando los papeles en la carpeta con la ayuda del pelirrojo que la estaba cuidando – veo que no pierdes tiempo – opinó para hacerse notar al ingresar.
- Obviamente, así puedes notar que estoy hablando en serio sobre nuestra alianza – dijo ella mirándolo a los ojos.
- En