PHOEBE

Suelto un largo suspiro al ver a todas esas chicas frente mi mesa, todas ellas eran unas lobas chismosas y criticadas, y como siempre venían a criticarme a mi y a mi mejor amiga por estar conmigo, pero como siempre no les prestabamos atención, después de todo ya estábamos acostumbradas y no era nada extraño que me estuvieran criticando.

Le pido a mi mejor amiga que salgamos de allí, porque no creo que esas lobas mucrosas dejen de criticarme y tirarme en la cara que jamás encontraré a mi pareja destinada así que mejor salgo de allí antes de que le haga un daño a alguna de ellas y es lo que menos quiero.

A pesar de que nos íbamos, esas chicas seguían molestando y me estaban haciendo salir de quicio y ahora mismo no podía tener una pelea y menos cuando ayer me llevaron a dirección por haberme convertido en una loba frente a toda la escuela y que atacara a la misma chica que ahora mismo está volviendo a molestarme, la cosa es que esta ves gana, porque no puedo volver hacer tal cosa... Aunque un día de estos voy a darle su lección.

—Tengo entendido que mañana ingresa un nuevo estudiante— eso llamo totalmente la atención — Esperemos y sea la pareja destinada de alguna.

Hace mucho tiempo que no escuchaba que hubiera alguien nuevo, todos aquí eramos estudiantes antiguos y más cuando esta era una de las más prestigiosas escuelas, donde estaba cualquier ser sobrenatural... Bueno solo los de clase alta y bueno, mi padre es el líder de la nuestra manada y es muy reconocido y eso me permite poder estudiar en tan prestigiosa escuela... Pero, ¿alguien nuevo? Quisiera saber quien es.

—Dietrich, no deberías estar escuchando conversaciones ajenas — fulmino con la mirada a aquella chica que me habló.

—Yo escucho lo que se me pegue la gana — una de ellas soltó la risa.

—Déjala, de todos modos ese chico no se acercara a ella cuando vea esa gran marca — señaló mi espalda y eso me molesto tanto que gruñi — El día que encuentres a tu pareja esta saldrá corriendo al ver esa gran marca de la vergüenza.

—¡Ninguna de ustedes sabe lo que le paso, así que callense! — como siempre mi mejor amiga me defiende de esas depredadoras.

—Lorentis, deberías de alejarte de ella o se te pegara lo sinvergüenza — otro gruñido salio desde mi garganta al escuchar decir eso.

—Me encanta estar con phoebe, ella es mejor amiga que todas ustedes juntas — me toma de la mano, para salir de allí — vamonos, no gastemos nuestra saliva con ellas.

Verenice Lorentis, una hermosa loba y que era la pareja destinada de mi hermano mayor, Marc Dietrich, el próximo alfa de nuestra manada, y ella que será la próxima luna de nuestra manada, ella que tanto me comprendía y se había vuelto mi mejor amiga sin importarle lo que los demás decían, ya que ella sabía lo que en verdad me había pasado, ya que estuvo en ese lugar junto conmigo y mi hermano, así que solo ella y mi familia sabía lo que me había pasado y porque estaba esa gran marca de garras en mi espalda.

Esa marca no había aparecido allí sin alguna razón, como ha pasado anteriormente con algunos seres, que por cometer adulterio e incesto, les sale una marca en la parte más visible del cuerpo. Pero a mi me habían echo una marca de garras en mi espalda hace muchos años, cuando apenas era una niña y no fue por mi culpa, fue por descuido de los guardias de la manada y los que estaban á cargo de mi en ese tiempo... Mejor no le echo la culpa a nadie, porque uno nunca sabe, solo se sabe que esa marca solo se ha formado en una gran cicatriz que jamás se me borrara y que me da desde la espalda baja hasta arriba.

Se nota, porque comienza desde mi cuello. Pero nadie se hubiera dado cuenta de esa marca, sino hubiera sido por ese profesor que nos mandó a quitarnos la ropa para nuestra transformación, o sino nunca nadie hubiera visto mi marca, y todos seguirían hablándome tan bien por ser la hija del líder de esta manada donde se encontraba la escuela... ¡Qué rabia!

Cuando las clases se acaban, Verenice me acompaña a hasta mi casa y al llegar, me hermano sale de su habitación corriendo y se lanzó a su pareja llenándola de besos y cariño. En cambio yo salude a mis padres y estos me dan mi abrazo y mi beso.

—¿Te siguen molestando? — asiento al comentario de mi padre.

—Ya no se que hacer — me encojo de hombros — esas lobas harán que un día de estos quiera ahorcarme.

—No digas eso, Bee — mi madre me abraza y reconforta — que esos comentarios no te desanimen, tu sabes que lo que dicen ellas es mentira, porque tu nunca tuviste la culpa de lo que te pasó.

En cierto modo si fue mi culpa. Si ese día no hubiera ido al bosque nada de esto habría pasado y yo seguiría siendo la chica con más amistades por aquí, aunque con Verenice me conformo, ella siempre ha estado allí para mí, así que no puedo quejarme de mi mejor amiga.

Toda la tarde mis padres se encargaron de convencerme que esa marca no era mi culpa, sino que fue un descuido de ellos, siempre me lo han dicho, una y otra vez, tanto que ya estoy acostumbrada a las mismas palabras siempre que llego de la escuela, ya que esta es mi rutina diaria, ir a la escuela, escuchar los murmuro y insultos de las demás personas, cuando vuelvo a ni casa, mis padres me reconfortan y mi mejor amiga con mi hermano hacen lo mismo.

—Yo tu hace rato los hubiera echo pagar — miro sin expresión alguna a mi mejor amiga.

—Verenice, serás la próxima luna, no puedes tener esos pensamientos — se encogió de hombros.

—No significa que porque sea la futura luna, tenga que permitir que los demás hagan daño, ¡eso jamás! — aunque ella tenía la razón, no podía estarse expresando así.

El papel de luna es muy fundamental en una manada y que Verenice siendo la futura luna, piense de esa manera, puede dañar su reputación, porque muchos pensaran que tendrán una luna violenta y poco comprensiva, así que mi mejor amiga tenía que comenzar a pensar diferente.

Ella al vez mi cara, bufo y soltó un largo suspiro.

—Vamos a cambiar de tema — así estaba mejor, no quiero seguir con esto — tu hermano me comentó que el hijo del alfa de la manada vecina vendrá a estudiar a la escuela donde estamos — eso llamo mi total atención — Tengo entendido que lo pondrán en la escuela, ya que había tenido una tardía transformación y eso era un poco peligroso mezclarlo con los demás alfas, después de todo esos alfas son muy rudos y poco amistosos, así que tener a un alfa sin transformación es como un desagrado.

Y no era mentira.

Tener una transformación tardía no era nada malo, esos casos pasaban muy frecuente, y es mejor que esos seres sin sus lobos no estén tan expuestos y menos cuando de un alfa se trata, ya que como dijo Veré, ellos suelen ser muy rudos y poco amistosos y todo por ser muy territoriales, ellos siempre querían lo suyo para ellos solos y listo, los demás no importaban.

Un alfa sin transformación era una presa fácil para los alfas enemigos de este, así que es mejor esperar que su transformación esté completa y mandarlo a ver el mundo verdadero.

—Que da y sea tu pareja destinada — en serio ella era la mejor amiga que podía tener.

—Vere, se que me amas, pero también se que el al ver mi marca se espantada y pensara lo peor — ella niega.

—Se que el día que encuentres a tu pareja, el sabrá que esa marca no es de la que todos piensan — me abrazo — se que tu pareja te amara tanto que a muchas les dará envidia y más si es el hijo del alfa más fuerte de todos los tiempo, un alfa que por generaciones han sido literalmente dioses por la fuerza que tienen.

Y era cierto.

La manada vecina era conocida como la más fuerte, ya que todos los alfas que se ha posicionado son literalmente dioses, ellos se caractizan por ser unas máquinas de asesinar cuando se ven en peligro o ven en peligro a su gente.  Algunos dicen que la diosa luna les dio esta virtud, que son los favoritos de ella. Otros dicen que su primer antepasado fue el amante de la diosa luna y por eso les dio esta virtud... Hay otras historias más, pero lo único que si es verdadero, porque se ha visto es la fuerza que tiene la familia Friedrich, que por generaciones todos han sido hombres y han mantenido el apellido al margen y que su manada es llamada BloodMoon y todo en representación a la sangre que ha corrido por todos esos enemigos que se han querido meter en su territorio.

Que yo pueda ser la esposa de uno de ellos, sería totalmente la ventaja de demostrar que mi marca me llevó al mejor de los hombres... Pero mejor me bajo de esa nube, porque esos alfas siempre consiguen una pareja deslumbrante y sin imperfecciones, así que posiblemente yo no tenga nada de oportunidad.

—Vayamos a comer, tengo hambre y tengo que prepararme, por si esas lobas me comienzan a restregar que ese chico nunca me verá a mi ni pata amante — ella suelta un suspiro derrotada y solo asiente.

Verenice le encantaba comer en nuestra casa, aunque después de eso se comía la comida que le hacía su madre. Verenice y mi hermano no viven juntos y menos cuando mi amiga no es mayor de edad ni todavía, solo le falta un año para que sea mayor de edad y lo bueno de ella es que cumple el primer mes del año, así que será más rápido de que cumpla sus dieciocho pronto.

Después de todo, me fui a dormir, pensando en cuando encontraré a mi pareja y de si me aceptara como dice Verenice... Espero y sea así, porque no soportare que me rechacen.