72
Miro a mi alrededor y noto una gran estatua de piedra tallada de un caballo.
—Una estatua de un caballo.
—Sé dónde estás. Quédate ahí. Llego en unos minutos.
—De acuerdo.
Colgamos y voy a apoyarme contra la estatua mientras lo espero. No pasa mucho tiempo antes de que vea su gran figura acercarse a mí, y en cuanto me alcanza, me envuelve en un abrazo apretado.
—Estaba preocupado. Colgué con Tobias y no te encontraba por ninguna parte.
Se aparta y coloca un beso en mis labios.
—Lo siento. Estaba intentando ayudar a alguien, y no me di cuenta de que no conocía el camino.
Siento una punzada de culpa por haberlo preocupado.
—Está bien. ¿Todavía quieres ir a la herrería ?
Asiento.
—Sí, y luego ¿comida ?
Pregunto, y él asiente con la cabeza.
—Claro.
(EL PUNTO DE VISTA) Nathaniel
Estoy preocupado por ella, más de lo que me gustaría admitir, pero me alegra que me haya llamado cuando se perdió. La observo admirar las armas del herrero y mi mente se desvía hacia lo que Tobias mencionó.
Otro