Capítulo 96.
En uno de los pasillos del castillo la rabia de un alfa era incontenible… su respiración la transformación inconclusa e incluso la necesidad de llegar y llevarse a esa mujer que tanta falta le había hecho inundaban el lugar con un aura de pelea que nadie podría negar.
—¡Beca, necesitamos hablar!— grita Declan detrás de la puerta de la habitación donde estaba hospedándose la que era su mate destinada. — ¡Beca!— gritó esta vez desesperado y lleno de frustración— ¡No puedes evadir las respuestas y todas las preguntas que tenemos ambos! ¡Debes aceptar que nuestro destino es estar juntos!
Declan trataba de contenerse pero al no conseguirlo comenzó a caminar de un lado a otro con la misma actitud de un guerrero que va directamente a una lucha a muerte.
—¡Beca, abre la maldita puerta! —dice Declan, envuelto en una oleada de rabia y desesperación.
Su lobo, Ash, se mantenía aullando y expulsando todas las feromonas que eran posibles de su cuerpo para atraer a Carola, sin embargo, no obtenía