Mundo ficciónIniciar sesiónEL PRÍNCIPE:
Miro a Sol, dormida en mis brazos, tan pequeña y delicada. Sus cabellos caen como un río de oro derramado entre mis manos. El pensamiento de que alguien pudiera hacerle daño despierta un fuego en mi interior, uno que no se apagará hasta que sepa que estará completamente protegida.
—No sé si quiero eso. Es mi Tua cantante, tiene que ser mía —digo de inmediato, sin querer colocarle ese collar.—Señor, podrá hacer todo lo demás con ella, pero no debe marcarla o morirán los dos —me recuerda Sirius—. Al menos, hasta que encontremos una manera de hacerla sobrenatural sin que su sangre pierda el poder de convertirlo a usted en humano.Asiento en silencio. Lentamente, coloco a Sol sobre la cama con una suavidad que incluso me sorprende a mí mismo. Me arrodillo a su lado, dejando que mi mirada viaje por su rostro sereno. El collar parece






