Ambas se dirigieron al jardín, se sentaron y esperaron a que se les sirviera el té, luego de tomar un pequeño sorbo y probar los aperitivos, Katia comenzó a contarle a Keira lo que se rumoraba en la sociedad.
— Recuerdas que el día del banquete, cuando presentaron a los futuros esposos, todo parecía algo forzado, ¿Te percataste?
—Claramente si, después de todo la novia no lucía feliz
— Bueno, pues toda historia tiene un trasfondo, resulta que ella no ama al hombre con el que se va a casar, tal parece que la están obligando a contraer matrimonio, dentro de las cosas que pude enterarme fue que tiene a un hombre al que ama
— ¿Se sabe quien es el hombre?
— Con exactitud no, una de las nobles señoritas de la mansión Nielsen el día del banquete salio a tomar un poco de aire, ella comentó que se sentía algo sofocada por tanta gente, así que salió a caminar un poco, en su paseo nocturno por el lugar, s