Capítulos relacionados
Solo quiero protegerte
Alejandrina sentía que el corazón se le estrujaba mientras esperaba que Emilio le diera una respuesta, ella ya no podía seguir en esa misma situación, su esposo ya no estaba presente ¿Otra mujer? ¿de qué hablas Alejandrina, por supuesto que no hay nadie más, salgo a ver clientes y socios, la empresa está pasando por algunos problemas, necesito hacer conecciones, estos tiempos difíciles requieren que esté metido de lleno en lo que respecta a las compañías, de lo contrario podemos ir a la quiebra¿Y por qué no te has acercado a mí a contarme? ¿no me consideras tú esposa en los malos tiempos? ¿por quién me tomas entonces, Emilio?. - Alejandrina estaba evidentemente molestaCariño, por favor se consciente de tu estado, tu embarazo está demasiado avanzado, no debes preocuparte por nada que no sea de cuidarte a ti y al bebé, bueno... de nuestro Terrence también, pero no te canses demasiado, apoyate en las niñerasNo soy de cristal, Emilio, si no puedo ser tu roca en los momentos difíciles q
Qué quieres para dejarme en paz
El silencio en el despacho se hizo muy evidente, ¿podía Emilio confiar en su hermano después de que lo traicionó? ¿Qué pretendía Ulises, se preguntaba Emilio? pero en éstos momentos una mano le vendría de mucha ayuda, su padre, el Ceo Gerald, hacía todo lo que podía por ayudarlo, pero todavía seguía convaleciente por su reciente operación, por otro lado, involucrar a Alejandrina, ni pensarlo, ella estaba muy embarazada, el Ceo quiso desde un principio que ella se sintiera segura y a salvo, aunque parecía no estarlo lograndoMmm... ¿cómo puedo confiar en ti, Ulises? Pues... solo confiando, no hay otra manera, créeme solo quiero ayudarte a salir de todo ésto que te tiene tan agobiadoEstá bien pero te advierto, si me vuelves a traicionar, ignoraré tu existencia por el resto de mi vidaEl Ceo Ulises asintió aceptando las advertencias de su hermano. - entonces deja subo a cambiarme de ropa y bajo para que me pongas al díaEmilio seguía trabajando en su laptop cuándo de pronto una llamad
El bebé ya viene
La bella modelo, sirvió con total tranquilidad dos copas de champagne, le extendió una a Emilio y la otra la bebió hasta la mitad¿Dejarte en paz? ¿estás bromeando verdad?Si lo único que e querido desde que volví es a ti, soy una mujer bella, tan rica cómo tú, educada en los mejores colegios, soy tu mismo siendo una mujer, tu pareja perfecta, lo que quiero es que te divorcies de tu esposa y te cases conmigo, quiero que tengamos un hijo y que lo reconozcas cómo tú primogénito, que sea nuestro hijo el único heredero de nuestras fortunasEmilio observaba moverse de un lado a otro a Regina, daba la impresión de ser una serpiente, el Ceo permanecia tranquilo ante sus peticiones¿Y si no lo hago qué? ¿Qué harás?Si no lo haces por las buenas, afectaré gravemente las empresas Mendoza, pero si eso no te es suficiente, ¡mataré a Alejandrina y a tus hijos, los hijos bastardos de esa don nadie no van a ser tus herederos!Emilio pudo ver la verdadera cara de Regina en ese momento, su rostro ll
po
Alejandrina estaba hecha un mar de lágrimas, si la traición de Emilio no fuera suficiente también había roto fuentes, gritó por ayuda con la esperanza de que alguna mucama la escucharáLa puerta de la habitación se abrió, el Ceo Ulises entraba a prestar su ayuda, entonces vió a Alejandrina mojada de la ropa y con los pies mojados¡¿Qué te pasó, Alejandrina?! . - Ulises estaba realmente preocupadoE roto fuentes, Ulises, necesito ir al hospitalHay por dios... es verdad, ¿ya le avisaste a Emilio? ¿en dónde está él?Alejandrina extendió su mano y le dió su celular, entonces Ulises pasó las imágenes una por una. - ¡ésto no puede ser verdad? Emilio no haría algo cómo ésto, estoy seguroEl Ceo vió cómo lágrimas de dolor bajaban por el bello rostro de la bella embarazada. - No llores más Ale, estoy seguro que no es lo que parece, te llevaré al hospital y buscaré a mi hermano, él te dará una explicación ya verásSalieron de prisa al hospital, en el camino el Ceo Ulises llamó a MishimaSi, di
Una dolorosa traición
El corazón del imponente Ceo Emilio Mendoza latía a mil de alegría al llegar de sorpresa a la casa de su prometida Savana Clinton, su estresante viaje de negocios había terminado antes de lo previsto y había querido darle una sorpresa a su novia, deseaba besarla y hacerle el amor, el Ceo estaba muy enamorado de la hermosa rubia con hermosos ojos azules. Savana era una rica heredera con la cuál Emilio quedó flechado por su gran belleza, era caprichosa, vanal y arrogante, pero eso Emilio no lo veía por qué el amor por ella lo cegaba.Al Ceo se le comenzó a borrar la sonrisa cuándo vió la primera prenda masculina tirada un uno de los escalones que llevaban a la planta alta dónde se encontraban las habitaciones, era un saco gris, la grisacea mirada de le agudó, la segunda prenda que encontró era una camisa azul claro, era de buena marca y por alguna razón le eran familiares, él mismo usaba la misma marca de vez en cuándo.Se fue encontrando con más prendas conforme caminaba, un vestido qu
una inesperada sorpresa
Los periodistas que no dejaban acercarse a la iglesia intentaban fotografiar a los novios, se habían casado el millonario Ceo Cortez y la escritora Alejandrina de la Mora en una de las más exclusivas iglesias de nueva York, era una nota que no podían dejar ir. A bordo de una lujosa Limusina Los novios partieron a la recepción que darían en un exclusivo salón, adornado con miles de flores candelabros y toques de decoración referentes a la realeza, llegaron los novios, en el camino Marco sirvió una copa de champán a su ahora esposa, la veía demasiado nerviosa y no se explicaba por qué. ya habían pasado por lo más importante de la noche,—¿te encuentras bien Alejandrina? has estado muy extraña todo el evento, hasta parece que me estuvieras ocultando algo.—No! no me pasa nada, son los nervios de la boda! —Alejandrina trató de componerse, ella misma se estaba delatando, pero es que cómo demonios iba a llegar a su noche de bodas sin ser virgen? su cuerpo temblaba, sus hermosos ojos verdes
despedida de soltera
FLASH BACkUN MES ANTESEmilioSalí de la casa de mi... la que hasta hace un momento era mi novia, ahora para dónde demonios voy? seguí manejando por las oscuras calles cuándo comenzó a llover a cántaros cómo si el cielo me acompañara en mi tristeza, joder! lo que me faltaba! A lo lejos divisé unas luces, era un bar de moda del que había escuchado, no era muy de salir a antros ni a fiestas, solo asistía a los compromisos sociales en los que necesitaba hacer relaciones públicas, pero cómo estaba de paso y necesitaba anestesiar el dolor que traía en el pecho, estacioné mi coche y entréTomé la mesa más discreta que había en el lugar, a unos cuantos metros de dónde me encontraba, un grupo de mujeres estaban desatadas celebrando una despedida de soltera, la festejada llevaba un pequeño velo en el cabello, lo que me hizo recordar a Savana, me la había llegado a imaginar vestida de novia casándose conmigo tantas veces y ahora...Definitivamente éste bar no me estaba ayudando mucho, el alco
un proceder impropio, eres una zorra!
Saliendo de la Compañía Mendoza un elegante y apresurado CEO Emilio, iba de prisa a hacer una diligencia personal, era de vida o muerte que llegara a tiempoDespués de lo sucedido en el bar y de haber tomado a esa hermosa joven, el Ceo Emilio apenas despertó ordenó a su mano derecha Joshua Mishima, su inteligente y eficiente asistente personal japonés que investigara todo sobre los nombres de las mujeres pero sobre todo de la festejada, la mujer del veloEmilio debía asegurarse que en ese encuentro no hubiera quedado plantada su semilla, la sangre Mendoza era muy valiosa, no podían ni debían tener alguno de los suyos por ahí sin reconocer, era completamente tabú entre los hombres Mendoza tener un hijo bastardo.No puedo creer que haya tenido que pasar un mes para recibir la información que pedí de la mujer del bar, descontaré el bono de Mishima éste mes!Emilio estaba furioso, la información le había llegado tarde y con la noticia que ese mismo día Alejandrina de la Mora contraería nu