- ¡Te hice mi esposa porque me prometiste el dinero de tu familia! ¡y resulta que estás en la ruina! ¡¿Qué mierda?! ¡arruiné mi matrimonio y mi hija está creciendo sin mí por tu culpa!
- ¿Tu hija? ¡¿acaso la bastarda?!
- ¡Cállate! – volviendo a golpear a Ana – ¡nunca vuelvas a llamar a mi hija de ese modo! ¡¿te quedó claro?! ¡ahora largo de mi casa!
- ¡No puedes correrme, soy tu esposa!
- ¡Cecilia era mi esposa y estaba esperando a Cristina cuando la eché de esta casa! ¡largo o te saco yo mismo!
- ¡Atrévete a sacarme!
-Con gusto – y así Isaac se acerca Ana
Isaac toma a la mujer del cabello y la arrastra por toda la casa, hasta que la saca a la calle y la arroja como un perro – ¡Isaac!
-Solicitaré la anulación, ¡me tienes harto!
- ¡Isaac! – pero Isaac cierra la puerta en la cara de Ana – ¡maldito!
-Hijo…
-Mamá…no quiero que me molesten
-Hoy vienen los acreedores
-Que vengan mañana, no tengo tiempo para nadie…
…
-¿Qué has dicho?
-Su majestad, el vizconde Escalante será echado de su casa