Un Alfa desesperado.
Alessandro Black trataba de mantener a raya a su hijo. Jhon estaba como tigre defendiendo a su cría. El desmayo de Oliver había sido la gota que derramó el vaso.
El ex mano derecha aguardaba junto a Deeguel Rodríguez para poder pasar a ver a su hijo. Su enfado no desaparecía aún.
— Ya cálmate Jhon, seguro que es una resaca y un poco de debilidad, Oliver es fuerte y lo sabes.
— Eso no hace que me preocupe menos, cuando Nami se entere de que su hijo está en la clínica va a asesinarme. Me va a culpar Deeguel. Mi egipcio vive para mí y para Oliver.
— Todo se resolverá, y hablando de eso, dame un minuto — El padre mafioso salió a buscar a su hijo. Lo encontró cerca de una máquina expendedora sacando una bebida energética. — Emill, te levanto el castigo, desde ahorita vuelves a tu puesto, rescata la carga y envíala a los clientes, denme un momento de paz, carajo.
— ¡¿Qué pasa si no quiero volver?!
— Sencillo, Degél seguirá al frente y veremos cuánto dura el negocio antes de q