Capítulo 78. Maldición.
El cuanto el líquido tocó la cuerda de hilo de eophry, la cuerda estalló y el cazador se soltó de golpe, tuvo que dar unos cuantos pasos largos para mantener el equilibrio.
Hyllen levantó el rostro y descubrió que sus ojos estaban velados, no podía ver nada, era como si siguiera atrapado en aquella densa niebla, empezó a caminar arrastrando los pies, no quería caer en alguna trampa a tropezar con algo.
Llevaba poco más de media hora cuando sintió la luz del sol golpear en su rostro, sus ojos lentamente se fueron aclarando y pudo ver en donde estaba, la niebla se alejaba de él, estaba retrocediendo ante la luz del sol.
— Ya es de día...
dijo Hyllen entre dientes.
— ... me tomó toda la noche poder escapar.
Empezó a caminar después de tomarse unos minutos para orientarse, después de todo había estado avanzando a ciegas, sus pies estaban tan pesados como si llevara puesto zapatos de cemento.
Hyllen siguió caminando, con cada paso le costaba más respirar, era como si el