Suspiré levantando me de la cama, miré en mi escritorio y vi todos los medicamentos sobre el, tomé dos frascos entre mis manos y vi la etiqueta.
No consumir durante el embarazo
Tragó el nudo que se ha formado en mi garganta y pienso...
Vamos a superarlo pequeño, tu sólo tienes que ser fuerte y resistir, yo me encargaré de lo demás, lo prometo.
- ¡Amor! Andrea, necesito un poco de ayuda por aquí- oí los gritos de Alonso y salí de mi cuarto, abrí la puerta y mis ojos se agrandaron al ver la escena de risa frente a mis ojos.
- Mami- mi pequeña hija tenía los ojos llorosos mientras su padre trataba de arrancarle el cepillo del cabello el cual estaba todo enredado, los jalones que daba eran descuidados, avanzo hacia ellos y le impido seguir tocando el nido en sus cabeza que ha formado.
- Oh Dios, tranquila muñeca, mami lo arreglara, no te muevas demasiado- mi hija empezó a llorar y Alonso solo miraba la escena con nerviosismo.
- Te lo dije, las niñas son unas chillonas, papá- habló mi hij