La enfermera entró junto con la doctora. “Buenas tardes”. Los saludo a todos llevaba una máquina con ella.
“Bueno Dania, como me pediste, hagamos el ultrasonido con calma, checaremos los latidos y podrás saber el sexo del bebe”.
Dania sonrió. “Si, ellos son mi familia, pueden quedarse”.
La doctora empezó su trabajo, de repente se escuchó el sonido de los latidos constantes y rápidos del pequeño bebe, todos sonreían y Dania estaba feliz.
Dalia apretó la mano de su hermana sonriendo, si ella era feliz con el bebe ella la apoyaría.
“Este bebe está muy sano, se mueve mucho y será un varón”. Comentó la doctora.
La doctora terminó y salió. Todos miraban expectantes a Dania, no sab