John había conseguido convencer a Iliana de un breve encuentro con William, no sin dificultad.
Ella no quería ni oír habla de la posibilidad de volver a verse, tras el fortuito encuentro en la calle Iliana había estado sin dormir durante días, no podía comer, no podía dejar de pensar en William, estaba perdida y luchaba contra el deseo de ir a su encuentro a pesar de que ya habían pasado dos años.
Le había costado mucho superarlo, para ponerlo todo en peligro otra vez.
William le había hecho muchísimo daño gratuitamente y no quería volverle a dar oportunidad de ello otra vez.
Pero recibir noticias de Jamaica fue clave para que cediera.
Había intentado comunicarse con su hermana en estos dos años en vano, y las noticias escuetas que llegaban de la isla eran desoladoras.
Quizás el capitán tuviera noticias sobre su familia.
Accedió a encontrarse con el capitán en un parque al final de la tarde, en su hora libre. Le pareció que un lugar público ambos evitarían cualquier ef