Regresaron a casa, llevaron a los pequeños ya dormidos, los metió al baño, los despertó, baño y acostó a dormir nuevamente, los miró dormir por largo rato, y nuevamente un mensaje llegó.
"Espero por ti, estoy deseoso de probar nuevamente ese dulce néctar que destila de ese manantial, de subir por ese monte, y recoger todo ese valle hasta llegar a esas dos cúspides y mientras me deleito en ellas escucharte gemir del placer. Te estoy esperando, no tardes mi mujer misteriosa "
Amaranta cerró los ojos y suspiró profundo, apretó sus labios al igual que sus manos, salió de su habitación y fue a la de Xavier.
Tocó y un adelante la hizo seguir.
— ¿Que sucede AmiCris? Te ves como nerviosa ¿Pasó algo?
Amaranta caminó de un lado a otro
— Quiere verme nuevamente.
— ¿Y que estás esperando? Ve a ponerte como una diosa, anda ve arreglarte, yo me quedo con mis ahijados.
Amaranta cerró los ojos, tenía deseos de más, y al mismo tiempo temor.
— ¿Que te detiene? ¿Amas a Salvatore? —Pregunto Xavier al ve