Mundo ficciónIniciar sesiónAl siguiente día.
Me levante lo mas temprano que mi propio cuerpo podia o se permitía . una dicha rápida , un atuendo mas recatado. Hoy empezaría el segundo anzuelo. La secretaria dulce y amable , inocente y...tonta A los hombres ricos les agrada siempre tener el control..- me decia a mi misma ,admirando mi figura en el espejo . muy bien...destruyamos un matrimonio...- dije con una sonrisa . Al llegar a la empresa fui directamente a mi puesto de trabajo. Un escritorio a unos centímetros del escritorio del señor Enrique . Me acomode como pude esperando las inminentes ordenes de mi jefe, en el momento que abra la boca mi querido y calculado plan se coloca en marcha . Necesito que revises estos informes de contabilidad - dijo sin mirarla , extendió el expediente tranquilamente como quien entrega algo sin importancia. Lo tome rápidamente y me senté lentamente en el escritorio , cruzando las piernas para que la falda se levantara fácilmente mientras yo analizaba ese informe de contabilidad . Lo noto...claro que lo noto , que hombre no notaria que la mujer que esta a solo unos centímetros de el le esta coqueteando . señor- dije ,con una sonrisa calculada , ni muy amable pero lo suficientemente avergonzada...como "una chica frágil ". El me miro unos instantes y luego respondió . Dime- hablo como quien esta colocando su cordura al limite en la cuerda floja . No entiendo unos números...- dije levantándome , camine lo mas largo que pude , pero disimuladamente para que mi falda se levante mas . Me acerque a el , colocando la carpeta en su escritorio acercandome lo suficiente para que estemos lo suficientemente cerca . Esto...- dije , sonrojandome , como una colegiala enamorada . Es que las cuantas no coinciden con lo que se informa...es un error o la contabilidad de aquí es diferente a lo que conozco - dije , colocando un mechón detrás de mi oreja . El respiro lo mas profundo que pudo , tratando de no prestar atencion al hecho de que estaba muy cerca o que mi falda estaba muy corta , o tal vez el hecho de que era justo lo que le gustaba . Note el como me miraba y en el momento en el que "accidentalmente" nuestras miradas se cruzaron yo retrocedí como si estuviera avergonzada , las mejillas rojas y mis manos tapando mi boca . El se tenso ligeramente al verme apartarme . Perfecto , dije para mis adentros , mis manos hacian el estupendo trabajo de esconder mi sonrisa . Uno, dos , tres , conte mentalmente antes de hacer una reverencia . Lo lamento mucho...yo no quería invadir su espacio...- dije con ese dramatismo que la situación necesitaba , era tan perfecto el como el se creía cada una de mis palabras . El se levanto de su silla y con su fría mano tomo mi mentón obligandome a mirarlo , tome la postura de chica frágil , generando la reacción esperada . No te preocupes...esta bien..- dijo mirandome atentamente como si fuera un apetitoso trozo de carne listo para comer , su pulgar rozo ligeramente mi labio inferior como si el mismo se tentara . La oficina estaba en un silencio total a excepción de la respiración agitada del señor Enrique y mi actuación perfecta de " soy tan torpe , perdoneme" . El ambiente se corto justo donde necesitaba , pero con la persona que menos queria . señor...- dijo Raul el del Departamento de Contabilidad , aquel callado y reservado personaje . m****a...pensé que vendria otra persona , pense para mi misma , necesitaba crear testigos de esye " amor prohibido " y lo mas fiable eran las personas de la misma empresa , pero eso se estaba complicando por esta persona . Me aleje , como si el mero hecho de tenerlo aquí incitara algo totalmente prohibido , Raul se dio cuenta y aparto la cabeza mientras el señor Enrique se acomodaba el traje y se sentaba nuevamente en su silla con la expresion dura de siempre . --------- Cuando mi dia de trabajo termino y pude llegar a mi apartamento mi mente queria descansar , finjir ser la "delicada " secretaria era todo un reto , hacer expresiones "adorables" fingir ser practicamente "inútil" si mi querido príncipe encantador no estaba , era un completo dolor de cabeza . por fin...hora de dormir...- dije saltando al sillon para poder darme una buena siesta . La paz me duro muy poco pues una persona toco suavemente la puerta de mi departamento . Maldita sea la persona que lo parió..- susurré y a regañadiente me levante del cómodo sillón para habría la puerta . Frente a mi se encontraba un hombre alto , moreno , tenia buena cara y un cuerpo formado espectacularmente , si no fuera por que lleva el loro Acero seria un buen objetivo en mi vida personal . Señorita ...?- dijo como si preguntara mi nombre Catalina...Catalina Villares - dije un poco confundida por este hombre - y usted es? - pregunte de vuelta. Mi nombre es Rodrigo Alvarez - dijo seriamente - la señora Raquel Acero me envió para llevarla - dijo , no como una pregunta sino como una orden . Aja...y esperas que eme la crea - dije con una sonrisa sarcastica . No le estoy solicitando su permiso , le estoy informando que vendrá , quiera o no - dijo ,su rostro se oscureció rápidamente como si estuviera listo para llevarme a la fuerza si era necesario. Y adonde iremos exactamente - dije sabiendo que resistirme seria inutil. ------- Perra de porquería...- susurré para mis adentros mientras era empujada a servir tragos en lo que parecia una reunión extremadamente lujosa de ricachones . Mujeres con trajes seductores iban y venia con escoyes pronunciados , faldas pequeñas que dejaban poco a la imaginación . Y yo...pues estaba en la misma situación , lo único que nos hacia "irreconocible " era una estupida mascara de encaje que cubría solo la mitad de la cara .






