103. Una condena de amor

Bella

No quise contemplar la escena, por eso cerré los ojos…

Hecho que me permitió dominar mis emociones y el castañeo de mis dientes por culpa del frio tétrico que se abría paso a través de mis articulaciones.

Nuestras miradas se cruzaron cuando decidí abrir los ojos y percibí por un segundo como nuestro entorno se ralentizaba únicamente para nosotros. Estábamos a un solo suspiro de distancia y a una decisión de lanzarnos a los brazos del otro, sin embargo, teniéndolo tan cerca, resultó más inalcanzable que antes…

Su respiración palpó en mi cara cuando se hizo el intercambio y ahora era Sandro quien tenía la vida del hombre que amaba en sus manos. La sola imagen no solo me arrancó un jadeo, sino una furia incontrolable.

Grité hasta que me ardió la garganta y desaté una maldita osadía que la mafia me había regalado durante las últimas semanas. Fui más Ferragni que antes, fui tan mafia como todo lo que me rodeaba y empujé a Sebastian antes de lanzarme contra el pecho de Sandro.

El muy
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App