Início / Fantasía / La sombra del pacto / Capítulo 39 – El Precio de la Alianza
Capítulo 39 – El Precio de la Alianza

Sasha

Adrian está a unos pasos de mí, tan silencioso como la sombra que lo rodea. Puedo sentir la tensión que emana de él. Está más nervioso de lo que quiere admitir, más frágil de lo que parece. Pero sé que no me lo mostrará. No es su estilo. Prefiere cargar con todo el peso del mundo sobre sus hombros que mostrar la más mínima fisura.

Finalmente me giro hacia él, mi corazón latiendo más fuerte de lo habitual. La guerra que se aproxima no es solo una batalla entre lobos y vampiros. Es una guerra interna, una lucha por nuestras almas, por nuestra humanidad. Y a través de todo esto, no puedo evitar pensar en él, en cómo ha cambiado mi vida, en cómo me ha arrastrado a este torbellino de pasión y dolor.

— Adrian, murmuro, mi tono apenas audible, como una confesión frágil. ¿De verdad piensas que esta es la única solución?

Él gira la cabeza, sus ojos oscuros fijos en mí, buscando quizás una verdad que él mismo ignora. Hay un destello de duda en su mirada, pero también una determinación que no me deja descansar. Está dispuesto a todo para ganar, incluso si eso significa sacrificarse.

— No lo sé, responde lentamente, su voz áspera. Pero lo que sé es que no tenemos elección. Los Vassili no nos dejarán en paz, Sasha. Y si no tomamos el control ahora, seremos destruidos. Tú, yo, todo lo que tenemos… todo lo que somos. No dudarán en aplastarnos. Renée es nuestra única oportunidad, aunque la odie. Pero ella sabe cómo piensan los Vassili. Puede ofrecernos una apertura.

Me acerco a él, mi corazón latiendo con fuerza. Lo entiendo, más que nunca. Sé que no es un hombre que confíe fácilmente, y mucho menos en aliados tan dudosos como Renée. Pero la situación es mucho más compleja que eso. Una guerra como esta no se gana solo con armas. Se gana con sacrificios, alianzas y mentiras. Todo es saber cuáles son las correctas.

— Lo sé, digo con voz tranquila. Pero estoy… estoy preocupada. No solo por ti. Por todos nosotros. Lo que estamos haciendo va a cambiar algo, y no solo afuera. También adentro. Cuando esta guerra termine, ¿qué quedará de nosotros?

Él se acerca a mí, sus ojos buscando los míos como si buscara una respuesta que no tengo. Titubea, luego se pasa una mano por el cabello, visiblemente agotado por la situación.

— No lo sé, Sasha. No sé qué quedará. Pero sé que estoy dispuesto a hacer lo que sea para que estés a salvo. Para que este mundo, esta pesadilla que han creado, finalmente se detenga. Estoy dispuesto a perderme si es lo que se necesita.

Soy arrastrada por una ola de sentimientos contradictorios. El amor. El miedo. El dolor. Me siento a la vez tranquila y devastada por sus palabras. Él está dispuesto a todo, y yo también. Pero, ¿a qué precio?

Me acerco a él, posando una mano sobre su pecho. Él se sobresalta ligeramente, pero no retrocede. Estamos ahí, en esta habitación silenciosa, solos ante la verdad que debemos enfrentar juntos. El peso de nuestras decisiones recae sobre nosotros dos. Si fracasamos, todo se habrá acabado. Si tenemos éxito… pero, ¿cómo saber qué nos espera después?

— Lo lograremos, digo, aunque mi voz tiembla ligeramente. Juntos.

Él asiente, pero no parece convencido. Ambos sabemos que nada es seguro. La guerra, con todo lo que implica, no tiene reglas claras. Luchamos por el control, pero a veces, el control se escapa de todos, incluso de aquellos que creen tenerlo.

Me mira un instante, sus ojos buscando los míos con una intensidad que me quema. Luego toma una profunda respiración, como para llenarse de valor.

— Mañana, todo cambia, dice, su voz llena de determinación. Pero pase lo que pase, sigues siendo mi prioridad, Sasha. Haré todo lo posible por protegerte. No importa el precio.

No sé por qué, pero esas palabras, aunque cargadas de promesas y fuertes advertencias, me dan cierto consuelo. Me siento lista para enfrentar la tormenta a su lado. Juntos hemos atravesado lo imposible, y juntos atravesaremos lo que viene.

Pero mientras le prometo seguirlo, sé que no hay ninguna certeza en este mundo. No sabemos lo que el futuro nos depara. Quizás mañana, todo estará roto. Quizás será el fin de todo lo que conocemos. Pero quizás también… quizás haya una oportunidad de ganar.

Mañana, la guerra comienza. Pero por ahora, estamos aquí, juntos. Y eso es todo lo que importa.

El plan está en marcha. El ataque a los Vassili se lanzará a la medianoche. El momento de la verdad se acerca, y con él, lo desconocido. El precio de la alianza con Renée, de nuestra decisión de luchar a toda costa, solo se conocerá en unas pocas horas.

Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App