Mirando a mi alrededor observo un lugar tranquilo, el cual a pesar de tener el cielo muy nublado, no es frio y no parece que vaya a llover pronto, es un lugar realmente hermoso.

—Ya tengo el equipaje, vamos por el coche que renté —me dice Jonah, apareciendo detrás de mi.

—De acuerdo, vamos…

Finalmente estamos aquí, un viaje de solo una semana, en el que pasaríamos un bonito tiempo en la naturaleza, en una cabaña que Jonah rentó en las montañas. Al inicio me preocupé de que fuera un lugar demasiado frio, pero Jonah me aseguro que por la época del año no lo seria, así que estoy muy emocionada por pasar una semana entera lejos del mundo en este lugar tan hermoso.

Saliendo del aeropuerto tomamos una camioneta que Jonah rentó, y usando un mapa llegamos a la cabaña en un par de horas, siguiendo un camino hacia las montañas a las afueras de la ciudad. Lo que mas me preocupaba de este viaje era Hector, por que temía que llorara o hiciera un escandalo dentro del avión, pero eso no pasó y m