La manada de los guardianes de bronce
El eco de unos pasos acelerados se escuchan en medio de una cueva húmeda y oscura, alumbrada por algunas antorchas donde un grupo de hombres y mujeres se encuentran reunidos.
Dos de ellos tiemblan de miedo, es la primera vez que son llamados a una reunión de este tipo y aunque sabían que existían y que se podían producir en cualquier momento, hace décadas no sucedía.
El eco de los pasos acelerados se detienen y una hermosa mujer de cabellos rojos y largos se detiene frente a los cuatro hombres que la esperan impacientes.
— Bienvenidos, señores — La mujer se sienta frente a una mesa de piedra, donde los cuatro hombres la esperan de igual manera, sentados en sillas de piedras.
— ¿Por qué motivo ha solicitado una reunión urgente, alfa Orión? — El hombre de traje que con el pasar de cada minuto transpira sin cesar, traga con fuer