Eva
La diosa sabe que yo he aguantado sufrimientos, golpes y maltratos y decidí buscar una mejor vida. Pero lo que ha pasado con las hechiceras, con Cielito enterándose de su pasado de esta manera, el sufrimiento mientras la encantaban, las pulseras y las otras mujeres encadenadas e impotentes… simplemente había sido otro nivel. Ni que mencionar a Índigo siendo entregada a ese gusano traidor; eran cosas que yo no podía soportar. Ellas no eran mujeres débiles que esperaban que alguien las salvara, todo lo contrario: habían aguantado años, soportado demasiado y logrado mantenerse de pie esperando el momento justo. Y que me lleve el diablo si yo no hago todo lo posible para que ese momento se dé.
Su Majestad estaba en camino, él mismo Valerius lo sabía, así que debía irle preparando el terreno. Claro que no me dio más detalles de mi misión, ese lobo era demasiado misterioso, pero yo iba a trabajar con lo que tenía. No dejaría que esas ratas avanzaran un centímetro más. Estaba que echaba h