Capitulo 19. Un nuevo comienzo lamentablemente.
Amaranta llegó a Suiza con el corazón en la mano. El señor Valcoba le ordena a sus dos amas de llaves que trajo consigo que monten las maletas al auto para dirigirse a su nuevo hogar.
Fueron casi dos horas de camino a la mansión Valcoba en Suiza. Al llegar Amaranta quedó asombrada por la hermosura de mansión; una fachada llena de flores, una fuente enorme con un estatua de angel y un camino de piedras perfectamente decoradas. Así de hermoso lucía su prisión.
—¿No te parece lindo el lugar? Compré está casa cuando tenías seis años, me dije a mi mismo que te la regalaría cuando fueses mayor de edad...
Amaranta le clavo la mirada fría y sería a su padre. Este al mirarla guardo silencio.
Entró a la mansión y el señor Valcoba le ordenó a una de las amas de llaves que la guiará a su habitación.
Luego de instalarse Amaranta busco cualquier electrodoméstico que fuese comunicativo; computadora, celular, laptop, lo que sea.
Su padre al verla caminar de un lado a otro lado interrumpe.
—Si buscas