3-La reunión

La dejé en su habitación y le dije a Melissa que le llevara ropa limpia a su habitación, después fui a revisar que los demás estuvieran cómodos y tubieran lo necesario.

Regresé a su habitación para llevarla a desayunar y para mi sorpresa la puerta estaba medio abierta y se podían escuchar algunos gritos provenientes de allí.

- ¿Esto es lo mejor que tienes?, ¿acaso no sabes quien soy?. Escucho Amalia gritar.

- Lo lamento mucho pero con el poco tiempo que tuve, esto es lo mejor que pude conseguir. Melissa le dice de manera calmada.

- No puedo creer que la servidumbre sea tan inútil, ya puedes retirarte.

Escucho pasos y sale Melissa con una lagrima por su mejilla qué limpia rápidamente al verme, me da una pequeña reverencia y se va a pasos apresurados. Toco la puerta entre abierta y Amila me deja pasar.

- ¿Porqué estas tan molesta? ¿Melissa te hizo algo?. Le pregunto preocupado por ella pero su respuesta me sorprende.

- Si, no puede hacer su trabajo de manera correcta mira lo que me trajo. Me dice señalandome lo que tiene puesto.

Un hermoso vestido rojo de verano, con tirantes qué le llega arriba de la rodilla.

- Pues yo creo que te queda hermoso. Le digo sinceramente.

- Pero no vuelvas a tratar mal a Melissa, ese no es su trabajo yo le pedí que te trajera algo de ropa para que pudieras estar más cómoda. Le digo algo molesto ya que no veo nada de malo en el vestido.

- Pues si tu crees que me veo hermosa entonces supongo que esta bien. Me responde sonrojandose un poco.

- Venía a llevarte a desayunar. Le digo y la guío hasta el comedor, donde mi familia y los demás sobrevivientes nos esperan.

Cuando la señora Deborah, encargada de la cocina, entra al comedor acompañada de Susan me sorprendo, ya que esta es la segunda vez que la dejan salir de la cocina, la primera vez fue cuando recién empezó a trabajar, fue un desastre, termino echándome la comida encima, así fue como conocí a esa dulce chica.

Al pasar a mi lado ella me saluda de manera sutil.

- Relájate te ves muy tensa. Le digo intentando tranquilizarla un poco, y a cambio me da una pequeña sonrisa, esa que tanto me gusta.

volteo a ver a Amalia quien parece visiblemente molesta pero decido no preguntar y no darle importancia.

Después de terminar el desayunó le digo a mi futuro beta que no asistire al entrenamiento hoy, ya que le daré un recorrido a Amalia por la manada.

- ¿Porqué nadie te saluda con el respeto que te mereces?, en mi manada si alguien no me saludaba como se debe recibían un castigo. Me dice Amalia mientra paseamos en un parque.

- Yo lo decidí así, yo les dije a la manada que no lo hicieran al menos hasta que me convierta en alfa, supongo que entonces no tendré opción, aunque eso no me agrade. Le explico mientras le entrego unas cosas a un guardia para que las lleve a mi habitación.

Como es costumbre cada vez que salgo a caminar por la manada las chicas de más o menos mi edad me regalan cosas al verme, eso no me molesta, mientras sigan sin pelearse entre ellas por mi, aunque a Amalia parece molestarle ya que le gruñe a cualquier chica que se me acerca.

- Cálmate Amalia, ellas siempre me regalan cosas y a mi no me molesta.

- Lo lamento, no se que me pasa, pero no puedo evitarlo. Me dice mientras agacha la cabeza.

Por alguna razón verla triste me hace sentir mal así que la llevó a comprar un helado para levántarle el ánimo, lo cual funciona.

Más tarde la llevo a la academia, ya que tiene mi edad estará en mi salón, durante las clases le presento a mis compañeros pero no parece muy interesada en ellos y solo le habla a Vincent mi futuro beta.

Al llevarla a la cafetería decido comprar comida para Susan y Adriana de nuevo ya que de seguro estuvieron bastante ocupadas hoy, Amalia se sienta con nosotros.

Aunque su actitud hacía Susan y Adriana cuando se sentaron con nosotros me molesto mucho.

- No puedo creer que hayas sido tan grosera con ellas. Le sigo de manera enojada.

- No puedo creer que te enojes conmigo solo por unas simples omegas. Me responde ella igualmente.

-Esas omegas son mis amigas, y comprendo que en tu manada se hacían las cosas de manera diferente, pero ya no estas en tu manada, te deje pasar todo lo anterior porque no solo perdiste tu hogar sino también a tu familia, y de verdad no quería parecer grosero pero no tienes derecho de tratar a nadie de esa manera solo porque te sientes superior a ellos, aquí no eres la hija del alfa, así que bájale un poco a tu ego. Le digo mientras veo que empieza a llorar y aunque eso no me guste no puedo dejar que nadie trate mal a los miembros de mi manada ya que yo soy su futuro alfa y es mi deber protegerlos.

- Llévala a casa, no asistirá a más clases hoy. Le digo a Vincent mientras me paró y salgo de la cafeterías.

PUNTO DE VISTA DE SUSAN

Estoy acostada en mi habitación mientras espero a que llegue la media noche para escabullirme por la ventana para salir de mi casa, y poder ir a la reunión secreta que se llevará a cabo en una cabaña abandonada en la manada.

- Ya que estamos todas presentes daremos inicio a la reunión secreta de admiradoras del afa Cole. Dice una loba ya emparejada que se encuentra al frente de todas.

Aunque sea una loba ya emparejada, ya que ya cumplió los 18 años, sigue siendo parte de nuestro grupo ya que fue una de las creadoras del grupo y actualmente solo asiste para intervenir y evitar que nos peleemos.

- Sofia quien a convocado la reunión. pregunta una de las lobas.

-Que pase adelante la que convocó la reunión de emergencia. dice Sofia.

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