Capítulo 24. Hotel Golden
Isabella y Catalina salen del vestidor, pero Benedict ya no se encuentra allí. Ella recorre con la mirada el sitio y no puede verlo por ningún lado. La idea de que él simplemente se cansó de esperar y se ha ido, hace eco en su mente.
—Señora, apúrese, todavía tenemos que ir al salón de belleza y nos queda poco tiempo. —La voz de Blas a su costado la sobresalta.
Isabella asiente, se despide de Catalina y sigue a Blas hasta dónde había estacionado la camioneta cuando llegaron. Cuando abre la puerta, se sorprende de ver a su esposo allí, en el asiento trasero, esperando mientras mira atentamente la pantalla de su celular.
—¿Cuánto tiempo te vas a quedar allí mirando? —pregunta cuando Isabella se tarda unos segundos en reaccionar.
Isabella sube a la camioneta. Blas la pone en marcha al momento.
—¿Siempre has sido así de estúpida? —Isabella voltea de manera brusca a mirar a su esposo cuando él hace esa pregunta. No entiende su cambio tan repentino de humor, y mucho menos su pregunta—. Po