Capítulo 196. La familia crece
El cielo está despejado y la brisa del atardecer acaricia con suavidad el jardín del Belle Palace Resort, que vuelve a vestirse de celebración. Esta vez, los protagonistas son Megan y Esteban. La ceremonia es elegante, íntima, envuelta en tonos crema y rosados que se funden con la luz dorada del sol poniente. Todo parece salido de un sueño. Los invitados están de pie, atentos y emocionados.
Bella, sentada en una silla decorada con encajes suaves, luce un vestido de maternidad que realza su barriga de casi nueve meses. Se ve radiante. Su rostro refleja tranquilidad y dulzura.
Benedict no se aleja de ella. Está justo a su lado, tomándola de la mano. Sus ojos la escanean con preocupación amorosa cada vez que ella hace un gesto o se acomoda en la silla.
—Estoy bien —le susurra Bella, llevándose una mano al vientre—. Solo estoy emocionada… y feliz.
Él asiente, pero no deja de sostener su mano, atento.
A pocos pasos de ellos, Gaspar conversa animadamente con sus hermanos. Hace meses, Bella