Cap. 175: Una noche con el jefe. Un bebé inesperado.
Cap. 15: Van a pagar las consecuencias.
Marie caminó por el pasillo del edificio con una sonrisa serena, aun sintiendo el sabor de los besos de Nathan en los labios y el eco de sus palabras en su pecho. Era la primera vez en mucho tiempo que sentía que todo empezaba a tener sentido: él la amaba, la defendía, la había elegido.
Pero al llegar a su puerta, se detuvo.
Frunció el ceño.
La puerta no estaba cerrada del todo.
—¿Qué demonios…?
La empujó con suavidad. Se abrió con un leve chirrido. Marie miró con atención alrededor del recibidor. La luz de la cocina estaba encendida, y todo parecía silencioso. Avanzó un par de pasos con creciente inquietud.
—¿Mamá? —llamó—. Ya llegué…
No hubo respuesta.
Una punzada de miedo le atravesó el pecho.
Entonces giró hacia la sala… y el mundo se detuvo.
—¡Mamá!
Emma yacía en el suelo, con una taza rota a su lado, los ojos cerrados, el rostro pálido. Marie sintió que el alma se le desplomaba.
Corrió hacia ella, pero se detuvo al sentir un tirón sutil en