Si inventarme una historia para que me dejen salir sin llamar a la policía y que fuera creíble, fue complicado, salir de aquí sin que alguno de ellos me reconozca, lo será el doble.
— Cada uno debe ir hacia uno de nosotros. Debemos revisarlas. — dice Edward.Trago duro, sabiendo que no hay manera de salir de aquí y si corro, solo confirmarán sus sospechas y por ello, no podré marcharme como lo deseo. Así que, antes de que la puerta se cierre, regreso a la habitación.— ¿A dónde vas?— Se me olvidó algo en la habitación, lo siento. — susurro con voz reforzada, porque no me es posible cambiarla lo suficiente para que no me reconozca.Rápidamente, regreso a la habitación y toco la puerta del baño, porque allí es donde ella esta oculta, ese fue nuestro trato. Pero, no responde. Así que, aclaro mi garganta, de