— Otra vez estas muy callada – Ethan cabalgaba junto a mí de regreso a la casa.
— ¿Qué quieres que diga? – pregunte saliendo de mis pensamientos, él tenía razón había estado callada mientras volvíamos de comprar algunos regalos y también lo estaba ahora.
— No lo sé, siento que hay algo que te incomoda, pero no me lo dices – lo mire con una ceja alzada burlándome de su perspicacia.
— Brillante Sherlock Holmes – bromee un poco intentando desviar el tema – realmente soy un libro abierto para ti
— Aunque no lo creas, los años que llevamos trabajando juntos me han servido para aprender algunas cosas.
— ¿Como cuáles? – le anime a ilustrarme
— Como cuando intentas desviar un tema - me miro acusadoramente y yo solo pude reír - ¿Enton