– Recuerda lo que prometimos – Chloe tomo mi rostro entre sus manos obligándome a mirarla a los ojos
– Por supuesto que si amor – la acerque a mí para besarla, seguía sin entender cómo es que Chloe había terminado como testigo o como había hecho para salir sin que los guardias dispuestos para cuidarla lo notaran, pero no me quejaba, estaba feliz con ella a mi lado.
Para mi pesar Chloe se alejó de mi con una sonrisa, y antes de que dijese nada mis ojos conectaron con sus amigos que ahora que se acercaban con rapidez al abogado que llevo el caso de nuestra parte.
– Oye Chloe, esa que le acaba de saltar encima al abogado no es una de tus amigas – señale con mi nariz hacia ellos, y Chloe al voltear sonrió para tomar mi mano y arrastrarme con ella hasta donde ellos estaban.
– Ven, los presentare – Aunque me costaba trabajo distinguir a las amigas de Chloe, había encontrado el truco desde la última vez que las vi en el hospital. Ambas amigas habían ido donde estaba el abogado seguramente