«Una visita»
Esa mañana el sueño había arropado por completo a Laura, pero después de más de 2 horas no sabía si estaba durmiendo o había entrado a un mundo paralelo, ya que estaba frente a una mujer alta de cabellos rubios muy hermosa.
—Hola.
—¿Estoy soñando?
—Sí, pero he decidido visitar a tus sueños. Soy Sandra, la madre de Gema.
Laura reaccionó de inmediato ante su voz y no podía creer lo que escuchaba. Ella no podía dejar de mirarla y las palabras no salían.
—Yo…
—Yo te quiero agradecer por llevar luz a mi familia y he pedido permiso para venir a tu sueño solo para esto.
Todo era confuso y en ese momento su cuerpo empezó a transpirar, y era que todo se sentía tan real. Ver a esa mujer frente a ella solo hacía confundirla.
—¿Sabes qué soy? —preguntó llena de miedo por todo lo que había sucedido entre ella y Gabriel.
—¡Claro que sí! “Eres la dueña de mi corazón” —terminó colocando su mano sobre el pecho de Laura.
—¡Señorita, señorita Laura, despierte!
En cuánto Sara se percató de q