«Riiin, Riiin»
—¿Dónde estabas? Te he llamado muchas veces y no respondes.
Sabrina quería compartir su alegría con su amigo y despedirse de él, pues como había llevado a cabo lo que tenía planeado en contra de Gabriel y ya estaba determinado que se marcharía muy lejos.
—¿No viste las noticias? Todo es un caos y estoy atento a mi celular en caso de que necesiten refuerzos.
—¡Los millonarios y sus espectáculos públicos! —dijo con ironía. —No creo que necesiten más policías… Esta noche quiero verte y despedirme.
—¿Despedirte?
—Sí. Deseo iniciar lejos de todo y todos… ahora que ha llegado el momento, no pienso desaprovecharlo
El corazón del hombre empezó a latir con fuerzas, pues ella se marcharía una vez más y no le hablaría sobre sus sentimientos. Esa historia de amor no era algo que se podía llevar a cabo y al parecer había llegado el momento de aceptarlo…
—¿Estás ahí?
—S, sí…
—¿Debo interpretar ese silencio como una negativa? Sí, es así, lo puedo respetar, aunque tengo muchos deseos d