Conociendo a mi nueva conquista.
La mañana avanzó a toda prisa y Laura se había ido a descansar después de una noche agitada. La señora Amanda se marchó a la empresa para reunirse con su hijo y Ángela, aunque estaba lista para almorzar, sentía un poco de miedo, pues quería visitar un restaurante que tenía su comida favorita, pero después de mencionar a Raúl, se sentía aterrada.
—No voy a permitir que de solo escuchar ese nombre, se me arruine el deseo de seguir adelante.
Así que tomó su cartera y decidió salir, pero al abrir la puerta se encontró con Tomás, quien al parecer había ido a recogerla.
—¿Qué haces aquí?
—Recuerdo que te había invitado a almorzar.
—Y yo recuerdo perfectamente que no respondí nada.
—Por esa razón estoy aquí esperando tu respuesta para almorzar donde tú así lo decidas. —terminó tocando su estómago y mirándola con ojos tristes, pero chistosos.
—¿Siempre eres tan intenso?
—Solo hasta donde me lo permiten, y al encontrarme con tu rostro relajado y algo sonriente, puedo deducir que te encanta la