XXIV. ¿Cuando Valerie Miller será feliz?
- ¡¿Martha, qué haces?!- gritó Jacob, deteniendo a su mujer, que, al parecer, había sido demasiado estimulada por la locura de su hija.
- ¡Suéltame, que esto también es culpa tuya!- le gritó a su marido con dolor en sus ojos. El ver el estado de su hija había sido un golpe demasiado duro para ella y todo por causa de este hombre tan indiferente y despiadado- ¡Nunca debí permitir que mi hija fuera novia de este hombre que es obvio, que no puede amar a nadie, solo quiere a su empresa y el dinero!
Le gritaba a Oliver que se había quedado aturdido por la bofetada en su rostro de esta mujer.
Se llevó la mano a su cara y recordó, que la última bofetada que había recibido de una mujer, se la había dado su madre.
- ¡Maldit@ la hora en que llegaste a nuestras vidas, como un mendigo buscando nuestra ayuda y te entregamos lo más preciado que tenemos, para que tú la humilles así!- le gritaba ciega de la rabia la Sra. Johnson- ¡¿Quién te crees que eres para abandonar a nuestra hija?, ella es me