Capítulo 72— Nuevos planes
Narrador
Apretando el teléfono entre sus manos, Sofía estaba cansada de todo este asunto. Se suponía que él solo tenía que ceder y darle el diez por ciento de sus acciones, solamente el diez por ciento, y con eso era más que suficiente para herirlo donde más le dolía, la compañía por la que había trabajado tantos años.
Caminando de un lado a otro en el interior de su habitación, hizo un par de llamadas y confirmándo que Killian no estaba en la oficina. Decidió ir a buscarlo para enfrentarlo. No necesitaba ser muy lista ni pensar demasiado para saber dónde encontrarlo, así que tomó su auto para ir por él. Conduciendo como alma que llevaba el diablo, recorrió un par de calles de la ciudad y deteniendo éste frente a la casa de los Alde, bajó enseguida.
Había soportado por mucho tiempo ver cómo Killian moría por Eira, cómo supuraba la decepción de haberse casado con ella en lugar de con Drayton. Por lo que al menos merecía quedarse con una parte de sus biene