¡Debo salvar mi vida!
Aun no salgo del asombro por todo lo que Cristopher me estaba haciendo, su mirada hace un tiempo habia cambiado, y estaba totalmente segura de que ya no era un hombre normal, era evidente que tenía problemas mentales y que necesitaba ayuda, yo ya no sé cuánto tiempo llevaba secuestrada, me sentía demasiado débil y angustiada, aunque trataba de cuidarme con la poca comida que ellos me daban, hacia un poco de ejercicio y permanecía dormida, para no gastar mis energías, de lo contrario hace unos días ya hubiese muerto a causa del estrés. Estaba demasiado confundida, no entendía nada de lo que estaba pasando allá fuera, no sabía si mi familia me estaba buscando o si, por el contrario, como yo, habían perdido las esperanzas de ser encontrada, y por lo visto ahora seriamos dos, las que estaríamos muertas de hambre en este lugar.
- ¡Serena! ¡Serena! Despierta ¿estas bien? - trato de despertar a Serena, lleva mucho inconsciente desde el golpe que le dio ese desgraciado y