Capítulo156
La vieja Rosario torció la jeta en disgusto. Cien reales de oro no eran poca cosa, pero ellos habían ido al campo de batalla no solo por recompensas económicas.

En especial, la vieja Rosario sabía que Theobald tenía muchas posibilidades de ascender militarmente por todos sus logros, pero por sustituir a Desislava y recibir el castigo en su lugar, además de que Desislava había liderado las tropas obstaculizando el avance, el ministerio de guerra lo había premiado y castigado a la vez, lo que dejó la situación en esos cien taeles de oro, pero sin ninguna recompense militar. La colera se apoderaba de ella.

Con su salud ya debilitada de tener tantas rabias, aquella noche acabó dándole casi que un patatús. Por eso, tuvieron que llamar a un médico durante la noche para que la atendiera, y solo así lograron componerla un poco.

Sin embargo, al ver que pronto necesitarían volver a comprar medicinas al doctor Dagel, Rosario se desesperó más: ya no quedaba dinero en la casa. El dinero del banquet
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App