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InicioLa Subasta
La Subasta

La SubastaES

Romántica
Paola Arias  Completo
goodnovel16goodnovel
9.9
Reseñas insuficientes
52Capítulos
157.1Kleídos
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Resumen
Índice

Sinopsis

Romance oscuroRomanceMultimillonarioDominanteObsesiónCEO

¡La subasta empieza, y que gane el mejor postor!. Para Lili no había mayor infierno que el vivir en su casa, bajo las duras reglas de su madrastra. Nunca creyó que su pase a la libertad la llevaría a un infierno mucho peor, al ser subastada al mejor postor. El excéntrico multimillonario, Daniel Jackson, es cautivado por su belleza, y realmente hará todo lo posible para llevarse el gran premio consigo. El frío e imponente hombre, solo lo hace para satisfacer sus deseos más oscuros. ¿Qué pasará con la bella Lili al convivir con aquel hombre?.

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Último capítulo

  • Epílogo.

    Las campanas de la pequeña, pero muy bien decorada capilla sonó; dando entrada a la hermosa novia sujeta del brazo de su padre. El vestido color marfil, de corte princesa. Suavemente cayendo por los hombros hacia abajo, rozando las curvas en lugar de aferrarse a ellas, para crear una silueta elegante. Con un largo cubriendo sus pies a la hora de dar el paso. Peinada en un semi recogido trenzado, por la cual pequeña flor adorna su cabello. Su suave maquillaje más su hermosa sonrisa, la hace ver como un ángel caído del cielo para Daniel; que impaciente espera por la llegada de su futura esposa. No puede estar más feliz, y decirse a sí mismo, que, sin duda alguna, se llevó el mejor premio en aquella subasta. Con orgullo podría decir que la inocente chica sería su esposa, y quién iba a pensar que, en ese lugar, se iba a dar un amor fuerte como el de ellos. De pie junto al padre; Daniel, enfundado en un traje gris, acentuado a su buen trabajo cuerpo y con la sonris

  • Capítulo 51.

    Lili¿Realmente que era lo bueno que sacaría vendiéndome a un desconocido?, en un principio creí que acabaría mal, que, por ser tan ingenua, mi vida sería muy diferente; donde ya no tendría ningún brillo en mis ojos.Daniel, me salvó del pozo sin salida donde caí. Es un bello ángel que me brindó todo ese amor que no sabía que existía en el mismo. La vida me dejó en claro que todo pasa por algo.Deseaba con todo mi corazón salir de casa, tener mi propia independencia, tener mi propio apartamento, obtener mi dinero que ganaría con el sudor de mi frente. Pero que erróneas expectativas me hice de cómo era el mundo fuera, sabía que existía la gente mala como Sandra. Que con sus maltratos me dejaron vacía. Lo que no sabía; es que me estrellaría con un muro, y to

  • Capítulo 50.

    DanielLas gotas de sudor bajan por su frente, mojando la almohada de la camilla del hospital. Las venas de su cuello resaltan al igual, que el rojo de sus mejillas. Su fuerte agarré en mi mano casi clavando las uñas en mis palmas me advierte de que otro pujo más viene, cierra los ojos con fuerza mientras muerde su labio inferior casi haciéndolo sangrar.— Eres fuerte, princesa. Tú puedes. Recuerda que te amo — Asiente con la cabeza, da un grito ahogado y de inmediato un llanto se escucha, mi corazón late fuertemente de felicidad. Se me plasma una sonrisa y con ojos llorosos, veo como la doctora sostiene en sus manos a mi hija. Una princesa hermosa, que llora fuerte mientras limpian su pequeño cuerpo, luego de envolverla en una manta, la enfermera la acerca a nosotros, Lili está bañada en sudor y lágrimas.— Es una preciosa nena, mira

  • Capítulo 49.

    LiliMeses Después...Estos últimos meses no ha sido fácil, como se lo dije a Daniel una noche; puede que haya perdido gran parte de sus cosas materiales. Pero son sólo eso, cosas desechables. Lo único que tenemos es nuestras propias manos y nuestra salud, con ello podemos lograr todo lo propuesto.De a poco se han ido levantando las empresas nuevamente, varios inversionistas decidieron invertir dinero en las grandes distribuidoras, me he metido de lleno y he logrado aprender de a poco en todo el ámbito de la única empresa con la que quedó. Sus centros comerciales, los centros informáticos; tocó rematarlos a bajos precios, para pagar a muchos empleados. Más todo lo que la ley ordena. Varias propiedades también se vendieron. Las deudas lo estaban sofocando y esa fue la solución más rápida.Me di cu

  • Capítulo 48.

    LiliUnas semanas después y el escándalo seguía ardiendo, como el primer día. Daniel dormía poco y se veía sumamente cansado. Mi padre al enterarse fue reacio por unos días conmigo, pero luego comprendió, cuando obligada le conté toda la verdad, desde los insultos y maltratos de Sandra. De ella no volvimos a saber absolutamente nada y agradecí a todos los dioses por ello. Nicolás. estaba quedándose con nosotros en la mansión, después que su esposa firmó el divorcio se ha vuelto un borracho, Santiago se ha multiplicado para hacer lo humanamente posible para seguir con las empresas de su gemelo más las suyas. El abogado encontró más pruebas en contra de Elisabeth, que morirá en la cárcel. El juez le dio cincuenta años de prisión, saldrá de ese lugar con las patas hacía delante.

  • Capítulo 47.

    Desperté sólo en la cama, y me levanté un poco con desconcierto, al tomar mi teléfono veo que son las once de la mañana y este tiene la bandeja de mensajes saturada, con miles de llamadas sin responder. Resoplo tirándolo a un lado. Me paso las manos por el cabello despeinándolo aún más. Lili, entra con una sonrisa y una bandeja en sus manos.— Te preparé el desayuno. — Susurró con suavidad, sentándose a mi lado.— Gracias, cielo, pero y Amanda — Se encogió de hombros.— No le he visto desde que me levanté. Sólo estaban las encargadas del aseo — Fruncí el ceño.— Bien. Ven come conmigo — Negó rápidamente.— No, Daniel. Nosotros ya comimos, sólo quise atenderte un poco, ¿Te molesta? &

  • Capítulo 46.

    DanielEscuchar y ver a Lili, decir y hacer todo eso; me hizo revolver el estómago, no sentí nada de placer. Y menos escucharla hablar tan convincentemente frente a Elisabeth, que en su cara solo mostraba lo excitada qué estaba, y sin darse cuenta de sus labios fueron saliendo las palabras solas. Al final de todo, fue un buen plan de mi princesa. Miro a Nicolás que está sumido en sus pensamientos, y como lo conozco tan bien se debe estar debatiendo, el peso de su acción. Aún más sabiendo que fue recién se casaron, qué bien lo habían guardado, pero era de esperarse, Elisabeth no quería dejar títere sin cabeza y la verdad sale a luz en cualquier momento. Lili charla con Santiago muy animados, riendo de las ocurrencias de él. Hasta ya le puso nombre a mi hijo.Amanda aparece en la sala con la mirada en el suelo y rápidamente se pierde hac&ia

  • Capítulo 45.

    Sonrío falsamente mientras sigue descendiendo sus manos por mi cuerpo, al llegar a mi entre pierna, me empieza a estimular un poco, sus pupilas están totalmente dilatadas y sus ojos verdes brillan de excitación.— Estoy volviéndome loca Lili, acuéstate —Ordena, freno su mano y niego con la cabeza.— No, quiero ser yo la que empiece — Digo muy segura de mí. Sonríe.— Como digas. Serás a la primera que permitiré que lo haga — Se separa, baja su vestido quedando desnuda frente a mi—. Amarra fuerte, que no me vaya a soltar, pequeña.Se acuesta, la amarró con unas cuerdas en su abdomen, sujetándola fuerte de la mesa, pongo las esposas en sus manos y seguidamente en sus pies. Agarró una venda negra y la pongo en sus ojos.— Tienes un monumento para

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52 chapters
Capítulo 1.
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De pie frente al enorme edificio, sonreí, pues las ilusiones de una nueva vida estaban justo a mi alcance. Entré muy segura de la decisión tomada, pero antes fui al baño, donde me cambié el desgastado pantalón por el vestido blanco de flores. Solté mi cabello y este cayó en hondas a mi espalda baja. En la recepción me indicaron el décimo piso, donde Margaret supuestamente me estaba esperando. Subí al ascensor con el corazón latiendo apresuradamente, el pulso errático y mi cuerpo hecho un manojo de nervios. Una sensación agradable se esparció por todo mi cuerpo, al momento de que las puertas se abrieron, dejando a mi vista un enorme salón con un podio en el centro. Caminé a paso lento, acercándome hacia la Sra. Margaret, quien al verme se levantó y me abrazó, dejándome sin palabras. —Creí que no vendrías, linda. Pero me alegra muchísimo que hayas aceptado — se separó de mí, agarrándome del brazo y trayéndome a un sillón de cuero enorme. —Bueno, en realidad necesito el
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Capítulo 5.
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El día de mi cumpleaños fue maravilloso, pues compartimos juntos como hace mucho tiempo no lo hacíamos. Paseamos entre las calles de la ciudad, contemplando las casas de estilo victoriano. Caminamos por aquellas vías empinadas hasta llegar a un restaurante donde almorzamos juntos. El resto de la tarde estuvimos conversando y sentados en la banca de aquel parque que solíamos visitar junto a mi mamá, bajo el radiante y hermoso sol. Madrugué para sacar mi identificación, luego me dirigí al edificio donde Margaret me estaba esperando con el contrato en la mano. Según Margaret, los exámenes salieron bien y no podía estar más feliz. Lo único que faltaban era mis iniciales y la firma. Leí el contrato una y otra vez, donde había varias clausulas bastante específicas: “Una vez el comprador obtenga su premio, tiene todo el derecho de hacer con su obra lo que le plazca”. “El premio debe someterse a las exigencias de su nuevo dueño por los siguientes tres m
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—Lili, estoy muy nerviosa. Mañana es la subasta. ¿Cómo crees que serán los hombres? — inquirió Brenda, la misma chica de mi edad que desde ese día nos hemos vuelto cercanas. —Solo espero que sea un hombre gentil. Una de las chicas escuchó mi comentario y soltó una carcajada. —No entiendo cómo Margaret trae a niñas tan estúpidas a un lugar como este. Pero dejo la sorpresa para que veas con tus propios ojos lo gentiles que pueden llegar a ser — se retiró contoneando sus caderas de un lado para el otro. —No le hagas caso, solo quiere asustarnos— le dije a Brenda. Muy en el fondo sé que nada bueno nos puede esperar. Desperté por Brenda, la única chica que considero como una amiga entre todas las demás víboras que nos rodean. Estas dos últimas semanas ha sido mi compañera de habitación. Caminaba ansiosa de un lado hacia el otro, hasta que cayó en mi cama boca abajo dando un grito frustrado contra la misma. —Me encantaría decirte que
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Capítulo 7.
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DANIEL   El día más esperado llegó, poniendo fin a mi larga espera. Mi apetito sexual es grande y cuando explote lo haré como un animal sin escrúpulos. Luego de firmar unos documentos importantes, salí hacia la mansión de Margaret, donde se lleva a cabo las subastas. Como uno de los mayores benefactores, fui uno de los primeros en llegar. Caminé por los pasillos en busca de mi presa; ya tenía enfocada a una bella rubia de pechos grandes. Todo cambió cuando vi a una pequeña y muy hermosa jovencita sostenida del brazo de la anfitriona. De repente mi corbata me sofocó y, aunque estuviera de espalda, su desnudez y su trasero me hicieron pasar saliva. Richards se acercó a ella y el muy hijo de perra tocó su piel descubierta. Eso provocó en mí celos y rabia. Esa pequeña será mía a como dé lugar. En cuanto llegué a ellos, la chiquilla estaba asustada, lo podía ver en su rostro. Esa expresión de terror en sus bellísimos ojos café claros
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Capítulo 8.
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LILI   No puede ser cierto, esto no puede estar pasándome a mí. No tengo otra opción, tengo un contrato firmado con aquella mujer y en las cláusulas está muy bien escrito que debo dejarme hacer todo lo que este hombre quiera hacer conmigo, aunque siento que voy a morir de un infarto. Jamás me habían besado, ni siquiera sabía que se pudiera sentir tan bien esa calidez y ese sabor amargo que percibí en su lengua. Brenda me explicó sobre el sexo, yo no sabía absolutamente nada sobre ese tema, pues no había hablado de eso con nadie, pero me dijo que la primera vez es muy dolorosa. El hombre con quien se fue, se veía buena gente, eso mismo me dije yo del Sr. Jackson, pero que equivocaba estuve. Me desgarró el vestido y sus gigantes manos tocaron mi cuerpo con violencia y con desespero, como si estuviera fuera de sí. Su lengua se adentraba en mi boca con fuerza, chocando los dientes entre sí, y eso que de a poco pude seguir su ritmo. En mi cab
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Capitulo 9.
La Subasta/Paola Arias
—Sr. Jackson, estoy dispuesta a soportarlo todo — respondí tímidamente, mientras que en su hermoso rostro se formó una sonrisa que me congeló todo el cuerpo. —Perfecto — me alzó en sus brazos y salimos de la habitación. Al fondo había una enorme puerta negra, la cual abrió con el pie; una habitación oscura con todo a su alrededor decorado de negro, excepto por las paredes que eran grises, pero se podía sentir el frío entre los huesos. Me depositó en la cama, dejándome en medio de las suaves almohadas, luego se quedó parado frente mí, quitando botón tras botón de su camisa. Su pecho quedó al descubierto y por más que moría de vergüenza, no aparté la vista, es como si estuviera embrujada. Su torso quedó desnudo, reflejando unos enormes pectorales con varios tatuajes cubriendo su piel; sus brazos eran enormes y llenos de tatuajes también hasta sus muñecas. Se quitó los zapatos y quitó el cinturón, lo enrolló en su mano y lo pasó por encima de mi busto, bajando p
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